Seis rosas para Pachara en la fosa común

FERROL

Una veintena de personas despidieron ayer a José Manuel Sayar, en el cementerio municipal de Ferrol

08 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No tenía a nadie, pero no estuvo solo en su despedida. Una veintena de personas acompañaron ayer los restos mortales de Pachara hasta su última morada, en una fosa común del cementerio de Catabois.

La ceremonia religiosa, oficiada por un sacerdote, fue muy breve, pero sobrecogedora, ya que, a pesar de que no había quien lo llorase, los rostros de los presentes mudaron de aspecto con el sonido de la tierra cayendo directamente sobre el féretro. La que pareció prolongarse excesivamente en el tiempo fue la labor de los dos sepultureros que tuvieron que rellenar el hueco de la profunda y estremecedora fosa común, valiéndose únicamente de dos palas de mano.

Sobre la tumba quedaron seis rosas, dos blancas y cuatro rojas, portadas por algunos de los asistentes, entre ellos Juan Fernández, exconcejal de Independientes por Ferrol, y una trabajadora del aparcamiento del Cantón, que recordó que todos los días pasaba por allí. Entre los presentes se encontraban, asimismo, los dos exediles del BNG Xosé Lastra Muruais y María Luisa Sabio, del BNG, y la dueña de la pensión La Parra, en la que Pachara vivió los últimos años, que fue la que hace unos meses alertó a los servicios sociales sobre su delicado estado de salud.

Tres amigos de la infancia, José Rivas, José García y Andrés Sedes, despidieron también en Catabois al popular personaje ferrolano, recordando que ya era polémico de pequeño, cuando vivía con sus padres en la calle Soto.

Pachara, que según estos viejos amigos tenía 72 años, falleció el pasado sábado en el hospital Lucus Augusti, al que había sido trasladado desde el complejo gerontológico A Veiga, en la localidad lucense de Láncara, en el que la Xunta le había conseguido una plaza hace unos meses, a raíz de su avanzado deterioro.

El traslado del féretro se produjo ayer la mañana desde el tanatorio Ventosinos, de Pobra de San Xiao, en Láncara, con llegada al cementerio municipal de Catabois a las doce y media, hora programada para el entierro. La exequias fúnebres fueron encargadas por la propia residencia de la tercera edad a la funeraria de la localidad lucense, que tuvo expuesto el féretro de Pachara en su tanatorio desde el sábado hasta ayer por la mañana.

Personaje popular

José Manuel Sayar era, sin dudas, uno de los personaje más populares de Ferrol. Heredó el apodo con el que lo conocía todo el mundo de su padre, el Pachara original, hasta cuya muerte él fue Pacharita. También tomó el relevo en el ya desaparecido oficio de vendedor de prensa en la calle, que mantuvo hasta que su salud se empezó a deteriorar. Su enclave favorito era la puerta del banco situado en la calle de la Tierra, en la que solía abordar a los conocidos para pedirles un euro, o dándoles de comer a las palomas en la plaza de Armas.

último adiós sobrecogedora ceremonia en Catabois

Fue el último vendedor de prensa en la calle de Ferrol, oficio que heredó de su padre