Iberdrola avanza con un proyecto eólico marino al que aspira Navantia

Bea Abelairas
Bea abelairas FERROL / LA VOZ

FERROL

La compañía decide este mes si el astillero ferrolano participa en el parque del Báltico

02 oct 2014 . Actualizado a las 13:46 h.

Iberdrola dio a conocer ayer un nuevo paso en su proyecto para instalar 80 molinos marinos en el mar Báltico. El pasado mes de junio ya anunció que una parte de esta inversión se adjudicaba a Navantia y daría trabajo a los astilleros de Cádiz, mientras que dejaba la puerta abierta a que los de Fene construyesen 29 piezas que se denominan chaquetas metálicas. Ayer la compañía aseguraba a La Voz que en las próximas semanas se decidirá si este megaproyecto generará carga de trabajo para los astilleros de Ferrol. Podrían construir una especie de plataformas para fijar los aerogeneradores, algo que, en cualquier caso, tampoco sería un gran contrato en materia económica, aunque serviría, según los expertos, para ganar experiencia en un sector pujante.

La compañía española instalará en aguas germanas 80 molinos eólicos con una potencia de cinco megavatios cada uno y se distribuirán en una superficie de 34 kilómetros cuadrados. Iberdrola deja clara su apuesta decidida por un proyecto para el que ya ha iniciado las pruebas que permiten examinar el comportamiento de los pilotes que se utilizarán en la construcción en Alemania de esta explotación eólica marina (en Wikinger), ya que se han cerrado con éxito los estudios geotécnicos realizados en el mar Báltico.

Apuntan que el grupo alemán de ingeniería y servicios Bilfinger, junto a varios contratistas con experiencia en la materia, han elaborado un trabajo pionero sobre el diseño de las cimentaciones de la eólica marina. Precisamente estos estudios servirán para cumplir la normativa del Bundesamt Für Seeschifffahrt Und Hydrographie, la autoridad alemana en este sector.

Iberdrola explica que los resultados de los trabajos serán de gran utilidad de cara a determinar las soluciones de ingeniería necesarias para el proyecto, así como el diseño, la fabricación e instalación de las cimentaciones.

El parque de Wikinger es el primer proyecto eólico marino de una empresa española en Alemania, un país que está apostando por este tipo de energía. El proyecto detalla que dispondrá de 350 megavatios de potencia y requerirá una inversión de cerca de 1.400 millones de euros. Los astilleros de Ferrol se encargarían de confeccionar 29 elementos denominados chaquetas metálicas. Sin embargo, la inversión final de proyecto está por determinar: en función del número de turbinas a instalar, podría alcanzar los 1.500 millones de euros. Durante los 20 años siguientes a su puesta en marcha, el proyecto generará ingresos para la administración local y regional por valor de unos 650 millones de euros y contribuirá a la creación de centenares de empleos.