El fuerte oleaje de la madrugada de ayer apenas causó daños en la zona
06 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Petra resultó mucho menos lesiva que su predecesora Nadja. La borrasca registrada el martes dejó vientos intensos, en especial durante las primeras horas de la tarde, en las comarcas de Ferrolterra, Eume y Ortegal; fuertes lluvias y tormentas a lo largo del día y la noche. Pero el impacto fue menor del esperado. En Cedeira el viento tiró un eucalipto, sin causar daños; mientras en Cariño tumbó otro árbol en el paseo marítimo y dobló una farola. En el resto de los municipios de la zona se registraron desprendimientos de tierra y caídas de señales e indicadores y contenedores de basura.
En Mugardos, efectivos del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) tuvo que retirar una valla publicitaria que amenazaba con venirse abajo, en la parroquia de Mehá. En A Seaña también sacaron un árbol derribado por el viento. El mar de fondo, que alcanzó a las 10.00 horas de ayer olas de algo más de 12,54 metros de altura, en la boya de Estaca de Bares, no causó, sin embargo, problemas de relevancia, a diferencia de lo ocurrido el domingo, con olas de 12,77 metros en esta misma boya. «A pleamar xa era máis pequena e iso foi o que nos salvou», comentaba un vecino de Cariño, que el fin de semana vio cómo el mar derribaba más de 30 metros de espigón del muelle comercial.
Pero los temporales no cesan y la nueva borrasca prevista para hoy azotará estas comarcas con vientos de unos 100 kilómetros por hora, acompañados de abundantes precipitaciones.