Asunción Balaguer: «A Paco le encantó trabajar en el Jofre»

La Voz

FERROL

Asunción Balaguer pasó un mes de rodaje en Ferrol.
Asunción Balaguer pasó un mes de rodaje en Ferrol. kopa< / span>

04 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Asus 86 años, Asunción Balaguer no para de trabajar. Tras despedirse de El Pisito, donde compartió escenario con Pepe Viyuela, la veterana actriz está preparando ahora la gira de El tiempo es un sueño -un monólogo inspirado en su vida escrito por Rafael Álvarez, El Brujo-, pero la viuda de Paco Rabal es tan amable que no le importa robar tiempo al tiempo para descolgar el teléfono y rememorar aquel mes de su vida que pasó en Ferrol. Fue en marzo del año 2000, cuando el rodaje de Divertimento la trajo a ella y a su marido a la ciudad naval, donde Asunción, asegura, se sintió «como en casa».

«Rodar en una ciudad pequeña es muy diferente a hacerlo en una grande. Todo resulta más íntimo y se hacen más amigos», comenta la actriz. A pesar de que ella no participó en la película -en la que su marido compartía protagonismo con Federico Luppi-, sí vivió muy de cerca el rodaje. «Era un largometraje misterioso, con mucho diálogo y recuerdo que Paco se levantaba a las cinco de la mañana para estudiarse los textos», apunta la viuda del actor.

«Muchas señoras de Ferrol nos invitaron a tomar café en sus casas. Todos fueron muy amables»

Como a Rabal no le gustaba que Asunción lo visitase todos los días en el Jofre -donde se rodaron la mayor parte de las escenas- porque decía que «la familia, en esos casos, molestaba», la actriz tuvo mucho tiempo para callejear y familiarizarse con la ciudad. «A veces me cogía un autobús para conocer los alrededores y también recuerdo que muchas señoras de Ferrol me invitaron a tomar café en sus casas. La verdad es que todo el mundo fue muy amable con nosotros y nos llevamos un recuerdo muy grato», anota Balaguer.

La actriz también guarda muy buen recuerdo del Jofre, un teatro en el que a su esposo le «encantó trabajar» y que a ella le pareció «grandioso, con aquella escalinata y las columnas de la fachada». Por eso no duda en asegurar que le gustaría visitarlo de nuevo, «para poder verlo rehabilitado». ¿Y para actuar sobre su escenario, el mismo que pisó su marido hace ya casi doce años? «Eso sería un sueño».