Una familia hostelera acondiciona un local en la calle Magdalena para ese fin
05 sep 2011 . Actualizado a las 12:54 h.Nueve meses después de la entrada en vigor de la ley antitabaco, la mayoría de los fumadores se han acostumbrado a la rutina de salir a la calle para disfrutar de sus cigarrillos o de sentarse en una terraza si además quieren hacerlo en compañía de una consumición. Pero el verano entra en la recta final y el tiempo ya no acompaña tanto para estar al aire libre. Sin embargo, en pocas semanas Ferrol ofrecerá a los fumadores la posibilidad de echar un pitillo a resguardo sin violar la ley, ya que una familia hostelera promueve el primer club de fumadores de la ciudad.
Son los dueños de la cafetería La Hacienda, Patricia Lagoa Piñeiro, su marido y sus padres, que acometen ya las obras de acondicionamiento del local anexo, que prevén que estén finalizadas la próxima semana. Es una iniciativa que responde a la necesidad de sus promotores de mejorar la actividad en su negocio. La cafetería está ubicada en la intersección de la calle Magdalena con A Coruña y no dispone de espacio suficiente para instalar terrazas, un servicio en creciente demanda. De hecho, la experiencia del verano, en el que el cierre de A Magdalena al tráfico sí permitió montar a sus dueños sillas y mesas en el exterior, fue definitiva para que se animasen a poner en marcha el club de fumadores, que también se vio propiciado porque el local contiguo, en el que funcionaba un comercio de alfombras, se quedaba vacío por la jubilación de sus propietarios.
El club, sin ánimo de lucro, funcionará obligatoriamente con socios, que solo podrán ser personas mayores de edad. Estos, que tendrán que pagar una cuota para pertenecer al club, contarán con una tarjeta similar a las que se utilizan para abrir las habitaciones de hotel que les permitirá acceder al bajo. Si quisieran adquirir consumiciones en la cafetería anexa podrían hacerlo, pero tendrían que llevárselas personalmente al club, tal y como establece la ley antitabaco.
Patricia Iglesias espera que esta iniciativa aumente las ventas en su establecimiento, y de hecho, una vez que entre en funcionamiento el local, mantendrá abierto su establecimiento los domingos, «para intentar captar clientes que vengan a ver los partidos de fútbol», explica.
Por el momento, los impulsores de esta iniciativa aún no han comenzado la fase de inscripción de socios para el club, ya que prefieren esperar a que los trabajos de adecuación del local estén terminados y también toda la fase administrativa de la puesta en marcha.
El nuevo servicio, que ocupará 110 metros cuadrados de superficie, vendrá a ampliar la oferta de este tipo de asociaciones en el país, en donde no son muy frecuentes.
Uno en Mugardos
De hecho, en la comarca, en concreto en Mugardos, funciona ya un club, aunque sus promotores no necesitaron realizar una inversión fuerte para acondicionar el local, según explica Patricia Lagoa.