Efectivos de la Guardia Civil de Valdoviño y amigos y familiares de José Manuel Anca Calvo, el vecino de Neda de 57 que desapareció el martes cuando había salido a pescar, realizaron ayer un nuevo rastreo por las inmediaciones del embalse de As Forcadas. La zona habitual a la que solía acudir cuando practicaba este deporte. Sin embargo, por segundo día consecutivo, este operativo no obtuvo resultados satisfactorios.
«No hemos conseguido ni un indicio, ni una pista de dónde podría estar esta persona», explican fuentes oficiales del cuerpo armado, encargado de la coordinación de la búsqueda desde que los familiares presentasen el miércoles por la mañana en el cuartel de Fene una denuncia por la desaparición de José Manuel Anca.
Caso complejo
Desde la Guardia Civil también se señala que, por los pasos que se han dado en la investigación, «el caso parece complejo». «No hay rastro ni de él, ni del coche en el que supuestamente salió a pescar el martes por la tarde».
El entorno de José Manuel Anca Calvo, marino mercante retirado, lo califica como «alguien tremendamente familiar». Y dejan claro que lo que le haya sucedido «tiene que ser un accidente».
A sus familiares les preocupa especialmente el hecho de que «es una persona muy metódica que nunca se retrasaba, porque ayudaba todas las noches a su madre».
El embalse de As Forcadas
La Guardia Civil trataba ayer de lograr pistas sobre el paradero de José Manuel Anca en el entorno del embalse de As Forcadas. «Según la información que ha facilitado su mujer, todo indica a que es el sitio más probable en el que se podría encontrar una pista», comenta. Hasta el cierre de la edición Salvamento Marítimo no había activado ningún operativo de búsqueda en las costas de la comarca.