La Xunta valora proteger las ruinas de Noville como Bien de Interés Cultural

A.Bruquetas

FERROL

06 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La Dirección Xeral de Patrimonio comunicó esta semana al Concello de Mugardos que está estudiando la posibilidad de declarar como Bien de Interés Cultural (BIC) el yacimiento romano de Noville, en la parroquia de Franza. De esta forma, el monumento pasaría a estar catalogado con la figura de mayor protección que concede la Xunta de Galicia. Las ruinas que se encuentran en ese lugar fueron excavadas a finales de los años 80 y tienen una superficie superior a los mil metros cuadrados. La evaluación que inicia ahora la consellería dirigida por Roberto Varela forma parte de un proyecto que se extiende por todo el territorio de la comunidad, aunque en estos momentos solo dos ayuntamientos de la provincia de A Coruña tienen restos arqueológicos con la relevancia suficiente como para ser analizados: Mugardos y Sobrado dos Monxes.

Inicio de las excavaciones

El profesor de Arqueoloxía de la Universidade de Vigo, Fermín Pérez Losada, realizó dos campañas de excavaciones en Noville. La primera comenzó en 1988 y la segunda se completó el año siguiente. Durante el transcurso de los trabajos, el equipo que se encargó de realizar las tareas logró sacar a la superficie un edificio residencial de unos 1.200 metros cuadrados, formado por dos naves principales unidas por un corredor. La tipología de este yacimiento responde al prototipo de villa de patio, es decir, la que tiene varios habitáculos rodeando a una zona central. Son construcciones muy habituales en las áreas geográficas del norte de Europa.

Por estas primeras aproximaciones se deduce que el edificio estuvo habitado, con seguridad, durante los siglos cuarto y quinto, y posee algunas comodidades que no eran demasiado frecuentes, tales como un perfecto sistema de calefacción a través del suelo de la vivienda.

Otra de las características llamativas del monumento es que está próximo al mar, con lo que se cree que los habitantes podrían dedicarse a tareas relacionadas con la pesca. De hecho, su proximidad a la costa provocó que en las primeras excavaciones se levantase un muro de protección para evitar que el agua pusiese en peligro los restos arqueológicos.

El alcalde de Mugardos, Xosé Fernández Barcia, confía en que «os traballos que van a comenzar signifiquen o inicio dun proxecto único para que os mugardeses poidamos disfrutar do noso patrimonio histórico». Asimismo, el regidor mostró su satisfacción «pola receptividade das suas demandas perante o director xeral do Patrimonio Cultural, José Manuel Rey Pichel».