Otoño no es época de cambios en el banquillo

FERROL

02 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Pese a todos los problemas del Racing, su entrenador, Juan Veiga, mantiene crédito para el presidente, Isidro Silveira, que ya dijo que esperará a diciembre para cambiar cosas -en la plantilla o el banquillo-. En los diez últimos años, nunca prescindió de un técnico antes de febrero. De entrada, tiene paciencia, aunque los éxitos deportivos tampoco sean garantía de continuidad. José Ramón Arteche y Luis César hicieron las maletas después de los ascensos del 2000 y 2004. El arousano había aguantado en el cargo pese a bajar en el 2003.

Veiga vive su tercera etapa en el club. La primera la cerró al pactar su dimisión en abril del 2006, tras un mal partido en Valdebebas y con el equipo a un punto de la zona de permanencia. Manolo García saltó de A Malata en Segunda B en una situación similar: no cumplía los objetivos y fue destituido en marzo del 2007. Silveira buscaba un cambio de rumbo, que halló precisamente Veiga, que subió tras una remontada.

En similar situación, también a falta de dos meses y pico para el final de liga, Silveira prescindió de Manolo Sánchez Murias en febrero de este mismo año. Míchel Alonso no consiguió clasificar al Racing para la fase de ascenso.