Un espectáculo muy potente. 80.000 vatios de luz y 40.000 de sonido. Empezó cañero, con un tema instrumental para coger calor. Producciones de vídeo con los temas. Más de veinte años de los vallisoletanos Celtas Cortos en la carretera. Con más vatios y más personal (quince técnicos y ocho músicos). Pero igual de reivindicativos. Hace quince años que compusieron una de sus canciones más conocidas: Tranquilo majete, «una canción que, tristemente, mantiene su actualidad, solo hay que cambiar los tres millones de parados por los cuatro», comenta Jesús H. Cifuentes, vocalista y letrista del grupo. «Intentar contar las cosas que vemos forma parte de nuestra misión», exclama. «Sin olvidarnos del disfrute, que nos permite dejarnos la piel en cada concierto», añade. Ayer, en el paseo marítimo de Xuvia, lo demostraron ante unas 9.000 personas. Jesús destaca que, a pesar de los años y de los grandes montajes, «seguimos manteniendo la risa, y teniendo conversaciones afiladas». Sobre su público Jesús afirma: «Son muy parecidos en todos los sitios donde tocamos, vienen a jugar con nosotros, a oír nuestros clásicos y a disfrutar».