Era un secreto a voces dentro de la política local, pero faltaba que el protagonista diera un paso al frente. José Manuel Rey Varela (Ferrol, 1975) se convertirá el próximo fin de semana en el nuevo presidente del Partido Popular. Sucederá así salvo un imprevisto de última hora porque ayer, el también portavoz de la formación en el Ayuntamiento, anunció que cuenta con 500 de los 800 avales de compromisarios que pueden acudir con voz y voto al congreso local del PP. Es decir, el margen de maniobra para cualquier posible alternativa queda muy reducido; en las últimas semanas lo intentó un ex concejal, con escaso éxito.
Era un secreto a voces, pero no había hablado el aludido. Rey Varela convocó ayer a los medios para anunciar: «Presento mi candidatura, ha sido una decisión muy meditada y tomada desde la responsabilidad». Hasta llegar a esa frase, ha realizado en las últimas semanas un trabajo silencioso hablando con representantes de lo que algunos han dado en llamar las «diferentes sensibilidades» dentro del partido en la ciudad. Se les puede identificar en las figuras de Juan Juncal, Arsenio Fernández de Mesa, Meca Arcos, Juan Blanco... De una gran parte de ellos cuenta ya con el aval suscrito o a punto de hacerlo. Porque uno de los objetivos que se marca Rey Varela es presentar un PP «en el que nadie sobra» y que tiene como reto volver a ser la primera fuerza; en municipales y generales les ha pasado el PSOE. Con una ya notable carrera política (presidente de Nuevas Generaciones, edil desde el 2002, diputado provincial, secretario del PP local...), Rey Varela presentó cuatro señas a las que quiere ser fiel y que le han pedido los militantes: «Dedicación, sentido común, cercanía a la gente y honradez». Y se mostró como representante de esa generación de ferrolanos de su edad «que hubo de irse, pero también de quien se quedó».
La próxima semana presentará al equipo que le acompañará, donde habrá, dijo, «renovación, experiencia y nuevas caras».