La Cofradía de Pescadores de Cedeira se opone a la ubicación y dimensión del puerto deportivo que la Xunta quiere construir en la ría. Rechazan el proyecto por muchas razones. Una de ellas, y quizás la de mayor entidad, es que las instalaciones náuticas son incompatibles con la Reserva Mariña de Interese Pesqueiro (RMIP) que el pósito pretende poner en marcha este mismo año. Será la segunda de toda Galicia, después de la de Lira, en Carnota.
El pósito, que califica la reserva marina como «un medio muy eficaz de conservación de la biodiversidad», echa en falta en la contestación que la empresa concesionaria hizo de sus alegaciones que no contemple «la inminente implementación del área protegida, que tendrá una importancia para la villa tanto a nivel ecológico como económico».
La cofradía confía en que en unos dos o tres meses se publique en el Diario Oficial de Galicia el decreto de creación de la RMIP. A partir de ese momento, se creará un órgano de gestión que empezará a trabajar en la elaboración de las normas internas del área protegida. Desde hace un año, hay una comisión creada cuyo fin es que Cedeira se convierta en la segunda reserva marina de Galicia.
Su demarcación quedará fijada desde las puntas Chirlateira y Meda, una a cada lado de la boca, hacia el interior (ver gráfico). En parte de este área se podrá faenar y mariscar bajo control de los órganos de gestión, si bien habrá áreas de alevinaje que estarán completamente vedadas a la pesca.
El siguiente paso a dar, que persigue la cofradía pero más a largo plazo, es conseguir una reserva en todas las aguas exteriores de la demarcación del pósito, desde Pantín hasta los acantilados de la Serra da Capelada, unos 30 kilómetros de litoral y con doce millas mar adentro.
Zona de alevinaje
El pósito quiere dejar claro que la zona en la que se pretende construir el puerto deportivo, en la parte interna de la ría, es un área propicia de cría y alevinaje de especies pesqueras y marisqueras que emigran a otras zonas de la ría e, incluso, fuera de la misma, donde se convierten en recursos para los marineros de la zona. Así, apuntan: «El hecho de que no sea una zona habitual de pesca no quiere decir que no sea una zona importante para el sector».
La entidad marinera aboga por hacer un puerto deportivo con menor número de puntos de amarre (411 son los proyectados por la Xunta) y por variar la ubicación, proponiendo como escenario alternativo la parte sur de la playa de Area Longa.