La autovía llega once años tarde

FERROL

El vial Ferrol-As Pontes se anunció primero para 1996, pero abrió ayer. Las dos localidades están separadas ya sólo por 33,8 kilómetros y 19 minutos en coche

26 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La hemeroteca es una mina. Buceando en ella se descubre que en 1992 la Xunta y los sindicatos firmaron el Plan Especial para Ferrolterra, que muchos aún recordarán. En ese documento se recogía que Ferrol y As Pontes quedarían unidos por autovía en 1996. Luego, esa previsión se retrasó hasta 1999. Pero no fue hasta ayer cuando se cumplió el sueño acariciado por los casi 200.000 ciudadanos que habitan las comarcas de Ferrolterra, Eume y Ortegal desde hace once años.

La conselleira de Política Territorial, María José Caride, presidió ayer la puesta en servicio del tramo de autovía en Espiñaredo (As Pontes) por el que los conductores llevaban meses aguardando. Fue un acto sin pompa, protagonizado por la intensa niebla que cubría As Pontes, pero de gran trascendencia para la comarca, como resaltó la conselleira, y como desvelaron el reloj y el cuentakilómetros tras realizar el viaje en coche entre Ferrol y As Pontes.

El recorrido se efectuó ayer a mediodía, tras el acto oficial. Por autovía, entre la rotonda de Catabois y la de As Pontes, donde finalizan los cuatro carriles, un conductor emplea 19 minutos en recorrer 33,8 kilómetros. El viaje incluyó imprevistos que uno se puede encontrar cualquier día, como un camión adelantando a otro, lo que obligó a reducir velocidad. Además, el cuentakilómetros nunca superó el límite permitido de 120 kilómetros por hora.

¿Se ahorra tiempo con la autovía? Definitivamente, sí. El mismo viaje entre Ferrol y As Pontes pero a lo largo de la AC-861 duró 25 minutos, que se emplearon en salvar los 37 kilómetros que separan por carretera Ferrol (Catabois) y As Pontes. Este trayecto por la AC-861 tiene una peculiaridad: el vial convencional sólo existe entre As Pontes e Igrexafeita (son 18 kilómetros), pero desde ahí y hasta Ferrol el conductor sólo puede utilizar la autovía. Por eso, el tiempo de recorrido no es aún mayor.

La carretera AC-861 tiene muy pocos usuarios. Al menos, ayer a mediodía los vehículos que circulaban por el vial se contaban con los dedos de una mano. Ni los bares de comida que hace años aparecían atestados de camioneros a mediodía parecen tener ya casi comensales.

La AC-861 quedará para servicio de los habitantes de los lugares de As Pontes, As Somozas y San Sadurniño que atraviesa: Espiñaredo, Pena de Eiriz, A Toca, Penadameda, Igrexafeita...

La autovía, en cambio, es un hervidero de tráfico, sobre todo pesado. Los camiones del carbón de Endesa y los que transportan piezas eólicas son los grandes usuarios de la AG-64.

En febrero del 2003 se inauguró el primer tramo de autovía entre Ferrol e Igrexafeita (hasta entonces, corredor rápido). Desde ayer llega a As Pontes.