La zona tiene diez equipos de vigilancia forestal integrados por dueños de monte

Francisco Varela

FERROL

01 ago 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

ferrol | Con la entrega de los equipos a Fomento Forestal de Monfero, una Sociedad Agraria de Transfornación (SAT) integrada por propietarios de montes madereros de este municipio e Igrexafeita, la comarca de Ferrol cuenta ya con diez grupos de dueños de vigilancia contraincendios.

El acto de entrega de los equipamientos (chalecos naranja, batelumes, prismáticos y radiotransmisores) se celebró la noche del pasado martes en el Círculo Gacela, una entidad privada de promoción del mundo agroforestalganadero, con sede en el barrio ferrolano de Esteiro.

La distribución territorial de los grupos de propietarios abarca casi todo el distrito forestal de Ferrol, desde el río Eume a la desembocadura del Sor.

Distinto origen

Las agrupaciones son de diferente procedencia. Así, seis pertenecen a asociaciones de propietarios federadas en Promagal (San Sadurniño, Moeche, Cariño, Mañón, Cedeira y As Somozas); en Vilaboa está adscrita a la cooperativa del lugar. El grupo del municipio de Cerdido fue promovido por la asociación de propietarios de la zona (Promacer), y en As Pontes surgió de la Asociación Forestal de Galicia (AFG).

Miguel Rozados, en nombre de la Consellería de Medio Rural, se trasladó a Ferrol para hacer la entrega del material a Fomento Forestal. Según la consellería, en toda Galicia están formadas unas sesenta agrupaciones de estas características pero es en la comarca de Ferrol donde tienen el carácter genuino de estar formadas por dueños de montes. Porque en Pontevedra y Ourense suele tratarse de entidades ligadas a las comunidades de montes vecinales.

Voluntarios

Estos equipos de dueños de montes son diferentes a los formados por voluntarios y que encuadra la Consellería de Vicepresidencia. En este caso son generalmente jóvenes y adultos procedentes de las ciudades y sus patrullas se desarrollan principalmente en las áreas boscosas más próximas a las ciudades de donde proceden. No obstante, algunas ciudades aportan más voluntarios que otras. Por ello no es extraño encontrarse a un voluntario ferrolano en un monte de Ourense.

La tarea de unos y otros es sólo de vigilancia. Están coordinados con la Guardia Civil o el Cuerpo Nacional de Policía (la comisaría de Ferrol cuenta con un grupo de investigación de incendios forestales), según la demarcación de cada fuerza de seguridad. En la comarca de Ferrol existe ya tradición en esta materia. Cerdido y Vilaboa (Valdoviño), con inmensos eucaliptales, apenas sufrieron grandes incendios forestales en los últimos años. Se debe a que siempre han contado con patrullas vecinales, que actuaron desde el primer momento de surgir la alarma, evitando así la propagación del fuego.