El alcalde de As Pontes cree que la transición energética tiene que ir acompañada de una apuesta por el conocimiento para dar futuro al empleo en la localidad
05 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Al frente de uno de los municipios que está experimentando las consecuencias de la transición energética a una economía descarbonizada, el alcalde de As Pontes, el socialista Valentín González Formoso, asume que por el momento pesan más los efectos negativos del proceso, pero confía en que lleguen proyectos que revitalicen la economía de la localidad.
—¿La transición energética será una oportunidad para el municipio?
—Cuando hablamos de que 120 camioneros se quedan de golpe sin carga de trabajo, y de que había una expectativa de que la central, en la que se estaban invirtiendo 218 millones de euros, funcionara 20 años más, y eso no va a suceder, hay que reconocer un problema. Es muy difícil sustituir ese motor económico en una comarca. Pero hay que reconocer las potencialidades en el ámbito de las nuevas tecnologías energéticas que tiene As Pontes como centro de generación de energía renovable, eólica, hidráulica e incluso biomásica y fotovoltaica, y también como centro de almacenamiento de energía. Tenemos un ciclo combinado, un lago con reserva de uso energético y, por tanto, vemos una capacidad de aprovechar esta irrupción de las renovables de una manera rotunda en la localidad.
—Ya se han presentado dos proyectos para la creación de sendas plantas de hidrógeno verde.
—Sí, ya hay promotores como Endesa y Reganosa que apuestan por crear en As Pontes un polo de generación y de almacenamiento. Es una satisfacción que vamos a acompañar con muchísima ilusión y con mucha determinación, como acompañamos siempre todos los proyectos industriales.
—¿Cree que se mantendrán los dos?
—Ojalá que se instalasen los dos, pero como dependen de ayudas públicas, lo que no se puede es arriesgar ninguno de ellos. Pero tiene todo el sentido del mundo que, si hay posibilidad, haya un acercamiento entre ellos para no poner en riesgo ninguno, aunque son ellos y también las Administraciones los que tienen que apoyarlos y ver si son viables.
—Habla de la postura que tomará desde la Administración local con respecto a estos proyectos. ¿Qué le pide a la Xunta y al Gobierno central?
—Sensibilidad, ya que las zonas que estamos sufriendo la descarbonización de forma abrupta requerimos de un apoyo claro en cuanto a inversiones y a convocatoria de ayudas y, por otra parte, compromiso con los proyectos que se están planteando y también para la incorporación a los mismos de aquellos que están sufriendo la descarbonización: las plantillas de la empresa principal y de las compañías auxiliares y del colectivo de transportistas. Que se cuente con ellos, que no pueden quedarse atrás. A Endesa hay que pedirle que, después de tantas décadas de obtener beneficios en un emplazamiento que no le ha generado nunca ningún problema, tiene que demostrar responsabilidad social. Hasta la fecha lo ha demostrado, ha firmado un compromiso con el ministerio y sindicatos para la recolocación de esta gente en los trabajos de desmantelamiento, y también la va a formar para que formen parte de los proyectos de futuro. Las Administraciones no puedan dejar sola a Endesa en ese sentido y deben favorecer que pueda cumplir ese compromiso. Además, los gobiernos deben respaldar proyectos que, sin ayudas públicas, tendrían muchas dificultades para salir adelante. El apoyo social lo van a tener, porque As Pontes está buscando su sitio y no quiere perder esa posición como referente de energía como la ha tenido los últimos 50 años.
—Además del ámbito energético, ¿en qué otros sectores ponen el foco?
—As Pontes tiene otras potencialidades en el ámbito forestal, en la logística y también en el ámbito general, porque estamos asistiendo ahora a la recepción de proyectos pequeños, medianos y grandes que se quieren instalar en el municipio. Ahora, de aquellos esqueletos que teníamos en Penapurreira, solo nos queda uno por ocupar. No renunciamos a nada. No solo estamos en los grandes proyectos, sino que estamos prestándole la misma atención a la ampliación de Severiano Agrocomercial o a la futura ampliación de Delicias Coruña, a la consolidación de Intacta o a la construcción de infraestructuras como una nueva zona logística.
—Después de su pasado con el carbón, ¿As Pontes está llamado a ser un municipio verde, con la producción de renovables y el aprovechamiento de recursos naturales?
—Sin duda. As Pontes servirá de ejemplo de transición en los libros de historia local, de una economía basada en combustibles fósiles a una nueva con combustibles limpios. Tenemos que ser capaces de acompañar ese cambio de modelo con valor añadido, con conocimiento y con la implantación de fabricantes de componentes. El sector debe generar una oportunidad a la gente joven que se está formando y que quiere trabajar aquí.
«Vamos a potenciar el desarrollo del sector forestal»
Además del sector energético, y sin desdeñar ninguna de las actividades empresariales con las que cuenta el municipio, Valentín González Formoso apunta al forestal como uno de los segmentos que espera que dé un salto de calidad en el futuro.
—¿El sector forestal será una alternativa de diversificación en el municipio?
—As Pontes, por su situación central en el eje de mayor producción forestal de Europa, y por la capacidad de vías de comunicación que tiene con ese eje, que van desde Barreiros hasta Ferrol, juega un papel fundamental. En los años 80 estuvo a punto de ser la ubicación de una planta de celulosa, después sonó en varias ocasiones como una posible alternativa a la celulosa de Pontevedra y ahora mismo suena como posible emplazamiento para la fábrica forestal de fibra que es uno de los ocho proyectos tractores que la Xunta presenta a los fondos de recuperación. En este ámbito, como en el energético, no solo aspiramos a grandes proyectos, sino también a otros más pequeños que están siendo analizados para el aprovechamiento de la capacidad forestal de todo el entorno.
—Cuentan ya con un ecosistema empresarial en ese sector.
—En As Pontes tenemos uno de los mayores complejos de fabricación de suelo laminado que hay en toda Europa, que integran Contrachapados del Eume, Rechapados del Eume y Galparket. Por otra parte, tenemos otra expresión de aprovechamiento forestal, como es Biomasa Forestal, que produce casi 50.000 toneladas al año de pellets para calefacción, de restos forestales que se obtienen en un radio de 50 kilómetros alrededor de nuestra localidad. Tenemos Adega, que fabrica estructuras en madera para todo el territorio nacional y también norte de África, y alguna carpintería industrial que produce viviendas modulares para todo el territorio nacional. Además, más de media docena de empresas de servicios del sector forestal. Ya tenemos una presencia muy importante, pero queremos seguir profundizando en ese sentido porque tenemos muchas capacidades.