Pero sigue siendo el rey

MOTOR ON

El todocamino más vendido, el Nissan Qashqai, acaba de recibir nuevos motores. Hemos probado la versión de gasolina más potente, que rinde 160 caballos pese a haber reducido su cilindrada. Con ello se consigue un consumo más reducido que hace que sea una buena alternativa al diésel.

19 may 2019 . Actualizado a las 23:08 h.

El Qashqai no ha cambiado por fuera, pero ahora lleva una mecánica más eficiente y las últimas tecnologías de ayuda a la conducción. El nuevo motor de gasolina ha sido desarrollado conjuntamente con Mercedes y se ofrece en dos potencias, 140 y 160 caballos. En ambos casos es un bloque de cuatro cilindros y 1.300 centímetros cúbicos, con turbo y sistema de distribución variable. Trabaja a más presión que el motor al que sustituye y en el caso de la versión que hemos probado (la más potente) da la misma aceleración: 8,9 segundos de 0 a 100. Este motor se usa también en el Renault Kadjar y en el Mercedes Clase A, aunque en este último tiene desconexión de cilindros.

Con esta nueva mecánica, Nissan ha conseguido reducir el consumo medio del Qashqai en medio litro, dejándolo en 5,3 litros a los 100 de media, una cifra muy buena para este tipo de vehículo. Las emisiones también se han reducido y el peso total se ve asimismo beneficiado por un motor más compacto: ha adelgazado 70 kilos. El resultado es un coche que gasta menos, contamina menos, es igual de rápido que antes pero tiene un comportamiento dinámico mejor.

A ello también ayuda la nueva caja de cambios automática de doble embrague con 7 relaciones, que trabaja de forma muy silenciosa y casi imperceptible cuando subimos de marcha. Si hacemos un kickdown apretando a fondo el acelerador, estira hasta las 6.000 vueltas y nos ofrece un sonido y un feeling sport. No hay levas en el volante, pero podemos ponernos en modo manual y cambiar con toques de palanca. Quizá lo que le falta para tener un comportamiento más deportivo es una dirección más precisa, uno de los pocos peros que se le pueden poner al Qashqai.

La amortiguación sigue siendo sobresaliente, lo que proporciona un gran confort de rodadura en cualquier superficie. Hay que recordar que la altura al suelo del Qashqai es de 18 centímetros, así que no estamos ante un todoterreno, pero se desenvuelve bien por caminos de tierra o bacheados.

Los nuevos Qashqai pueden equipar ahora el sistema de seguridad ProPilot. Se trata de un sistema de conducción semiautomática que actúa en la dirección, la aceleración y la frenada, ajustando la velocidad al tráfico precedente y manteniendo el coche en el centro de la calzada cuando circulamos por autopista. En atascos puede llegar a pararse por completo y retomar la marcha automáticamente si la detención es inferior a tres segundos.