Tomas Villén, director general de Porsche Ibérica, nos adelanta cuáles son las líneas futuras de la marca alemana. Un hombre apasionado del deporte y la familia, pero muy especialmente de todo lo que rodea al mundo Porsche, cuyos valores transmite en su día a día a todo el equipo que conforma la marca.
11 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Transmitirle a la gente cuál va a ser la estrategia futura de la compañía Porsche no es una labor fácil. Cómo se estructura, cómo se organiza y sobre todo como se enfoca el futuro, así comienza Tomas Villén hablando de su pasión:
«Hace setenta años, nuestro fundador creó el coche que a él le gustaría conducir y que no existía, poniendo así en marcha su sueño. Hoy, setenta años después, nosotros hemos bebido de esa filosofía y actualmente en vez de fabricar coches fabricamos sueños. Da igual el motor, la carrocería... Nos mueve la deportividad y la exclusividad y ahora también la movilidad. Somos la marca mas deportiva, con grandes victorias en cientos de campeonatos».
¿Llegará a desaparecer el volante algún día?
Nos cuesta pensar que el volante desaparezca algún día, pero si llega ese momento no nos vamos a cerrar a nada. Ahora mismo ya vamos a la última en tecnología ofreciendo motores de gasolina, híbridos y, en unos meses, eléctricos.
¿Hablamos de futuro?
Trabajamos con cuatro apartados clave: el primero es el cliente, todo lo que hacemos está dirigido a ellos y por eso somos la marca con mayor ratio de fidelidad. El segundo es ser el mejor empleador y así disponer del mejor equipo, cuidar al máximo las relaciones entre todos. Tercero, la innovación dentro de un negocio sostenible y aquí nos gustan los retos que nos plantean los clientes. Y por último buscamos la rentabilidad, que no es fácil al ser una marca exclusiva y de bajo volumen. Porsche representa tan solo el 6 % dentro del Grupo Volkswagen, pero más del 20 % de los beneficios, y esto nos da nuestra propia independencia. Nuestras decisiones siempre deben poner en valor la marca.
Porsche es sinónimo de deportividad, pero hemos logrado conjugar términos tan curiosos como innovación y tradición, prestaciones y uso diario. Nuestros coches llaman la atención por la calle y eso que solo somos el 1 % de las ventas, pero eso es lo que nos da la exclusividad.
Nuestras ventas no se frenaron ni durante la crisis y actualmente tenemos que decir que cada año batimos nuestro propio récord. Además disponemos de una alta rentabilidad en nuestra red que se sitúa en torno al 3 %. Creo que somos la única marca que todos sus directores, incluido yo, hemos gestionado alguna vez un concesionario y esto nos permite afrontar los problemas que aparecen cada día como si fuesen una final de Champions.
¿Se acabo el diésel?
En el 2017 lanzamos un Panamera sin diésel y actualmente lideramos el segmento, con un alto porcentaje de híbridos. No creo que vayamos a perder muchos clientes. Hemos sabido explicarle a los porschistas que esta tecnología es muy buena para ellos. No quiero despedirme sin dedicar unas palabras de entusiasmo a toda la familia Porsche y decirles que estamos preparados para afrontar el futuro cargados de deportividad y exclusividad.