El crossover que faltaba

MOTOR ON

En la ya extensa gama de Kia falta un modelo clave, el crossover pequeño, pero no habrá que esperar mucho. Se llama Stonic y llegará al mercado después del verano

09 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Si tenemos en cuenta que en el segmento inmediatamente superior de los compactos, las carrocerías crossover han ido comiéndole terreno a las berlinas convencionales, no sería de extrañar que entre los más pequeños ocurriera lo mismo. De ahí la gran ofensiva de productos que nos esperan en los próximos meses. Seat lanzará a bombo y platillo su Arona, Citroën hará lo mismo con el C3 Aircross, Opel ya lo está haciendo con el Crossland X y Hyundai lanzará en semanas el Kona, con nombre de isla de Hawai.

Y como no podía ser de otra manera, el Kia Stonic quiere partir entre este grupo con un aire más desenfadado y juvenil. La verdad es que a la vista el Stonic consigue un aire de coche ágil, eficaz y polivalente.

Incluso se diría que, de no ser por las protecciones plásticas alrededor de la carrocería, ni siquiera parecería un crossover, ya que su altura es muy reducida. Eso sí de longitud se encuentra entre la media de este segmento, con 4,14 metros. Las líneas suaves y redondeadas abundan desde cualquier perspectiva, los faros y pilotos se horizontalizan y no faltan las inevitables barras del techo que son de otro color diferente a la carrocería, propiciando docenas de combinaciones cromáticas como ya es habitual en el segmento, desde que salió el Renault Captur al mercado.

En el interior el carácter es igual. Con un diseño muy limpio y funcional, el Stonic será un coche agradable de conducir. En ese interior también hay elementos cromáticos personalizables, como los marcos del tablero central y la consola inferior. También crece la pantalla multifunción, ahora de siete pulgadas. El maletero cuenta con capacidad para 352 litros.

MOTORES

El Kia Stonic tendrá motores de gasolina de 1,25 litros de 84 caballos, 1.4 de 100 y 1.0 Turbo de 120, además de un diésel 1.6 de 110. Las cajas de cambio serán manuales hasta la llegada de una automática de doble embrague el próximo año.

Por supuesto, como la mayoría de sus rivales, ya contará con frenada autónoma de emergencia con reconocimiento de peatones. Los precios de acceso a la gama podrían rondar los doce mil euros en España.