«El vino es el gran dinamizador de la Ribeira Sacra»

J. M. Orriols

SABE BIEN

ALBERTO LÓPEZ

José Manuel Rodríguez es presidente de la Denominación de Origen desde hace 25 años

02 jul 2017 . Actualizado a las 04:00 h.

José Manuel Rodríguez es el único presidente que ha tenido la D. O. Ribeira Sacra desde su creación. «Son ya muchos años, pero si mis compañeros y los organismos oficiales siguen eligiéndome, yo no voy a defraudarlos, porque personalmente también es muy recorfortante ver como se ha transformado la Ribeira Sacra y que papel tan importante tuvo y sigue teniendo el vino en ese cambio».

-¿Cuántos bodegueros y viticultores iniciaron este proyecto?

-Empezamos 16 en el año 1.991 y comercializábamos 200.000 kilos de uva. Hoy, 25 años después, somos 90 bodegas y casi 3.000 viticultores, produciendo entre 6 y 7 millones de kilos, con el objetivo de llegar a los 10 millones.

-Pero con las dificultades que presenta el terreno tiene que ser muy difícil aumentar la producción. ¿ Qué les mueve a seguir sufriendo en la ribera?

-Sobre todo nuestro amor por la tierra, continuar la tarea de nuestros antepasados y la calidad única de nuestras uvas. Estas laderas son una bendición para ellas, que son el alma de nuestros vinos. Sin eso es verdad que sería imposible, porque el trabajo e incluso el riesgo, que conlleva mantener los viñedos, haría inviable elaborar un vino que tenga, como el nuestro, un precio razonable en el mercado. Pero cuando ves los premios que nos dan en certámenes mundiales, que nos codeamos con los mejores, que el consumidor responde... te cargas las pilas para seguir adelante y acometer nuevos proyectos.

-¿Qué significó la creación de la D.O. para esta zona?

-Con la denominación comenzó una nueva etapa en estas tierras únicas de los ríos Miño, Sil y Cabe, delimitando un territorio que no se sabía muy bien donde empezaba y donde acababa, fijando la población y dinamizando los concellos en distintas actividades económicas, en especial el turismo. Sin este sello de calidad y la promoción que nuestros vinos hacen por todo el mundo, hoy no existirían las infraestructuras de las que disfrutamos, no tendríamos los establecimientos hoteleros de primer nivel que tenemos y, desde luego, no llegarían hasta aquí los cientos de miles de turistas que favorecen las inversiones y ayudan en el mantenimiento del empleo. También tenemos que pensar que son miles las personas que viven directa o indirectamente del vino. Además nos puso en el mapa mundial de los mejores destinos y, tanto para los foráneos como para los gallegos, visitar la Ribeira Sacra es uno de esos objetos de deseo para conocer un paisaje, irrepetible, visitar los monumentos, especialmente el legado que los monjes nos dejaron, con iglesias, capillas y monasterios románicos; los viajes en catamarán, para conocer estas tierras desde un águlo inédito o disfrutar con la gastronomía tradicional gallega.

-Y también contribuye la buena impresión que tienen los más influyentes prescriptores mundiales.

-Exactamente. tengo que decir, como máximo responsable del Consello Regulador, que los grandes prescriptores nos tratan con un gran cariño y nuestros vinos obtienen importantes premios internacionales, especialmente en los concursos a los que acuden solamente bodegas de viticultura de montaña.

-Esta es tierra de tintos, pero también se dan las condiciones idóneas para los blancos. ¿En la Ribeira Sacra está creciendo su producción?

-De lo que cosechamos, el 93% es tinto, quedando para los blancos el 7% restante y, en este porcentaje, la estrella es el Godello. Esta variedad, que parece que estamos descubriendo ahora, en realidad lleva cientos de años en nuestros bancales. Pero es ahora cuando se comienza a valorar. Tiene, por sus muchas cualidades, un gran futuro por delante, lo que hace que muchos bodegueros ya estén elaborando mayor cantidad.

-Entre el 14 y el 16 de este mes se celebra el primer festival de la Ribeira Sacra. ¿ Nace con espíritu de continuidad o se limita a este 25 aniversario?

-Es un acto festivo que se celebrará anualmente. Queremos que sea un homenaje a nuestros vinos, a nuestras gentes y a esta tierra única.