Ella te da el click de la felicidad

SABE BIEN

cedida

Con «Haz click y vive sano», María Corbacho se convirtió en el espejo en el que vieron un reflejo de optimismo miles de personas cansadas del peso de complejos, tópicos y dietas yoyó que marean la autoestima. Ella perdió 50 kilos cambiando hábitos y ha venido a Galicia con nuevo libro bajo el brazo. 

01 may 2016 . Actualizado a las 09:40 h.

Quién no se comería un marrón si es cien por cien cacao. Y más aun si el espejo otorga. A María Corbacho hace tiempo que el suyo, ese que un día reflejó que tenía un problema de peso más allá de su aspecto, le dice cosas buenas. A la vista está en su blog (www.1reflejoenelespejo.com). Esta gurú de la vida sana, de Zaragoza pero con raíces en Galicia, sintió un día, al mirarse, un click en la cabeza: «Yo era de esas personas que dicen ?hoy me pongo a dieta? y paran a los 10 minutos. Pero fue literal, me miré al espejo y me dije que iba a cambiar». Y así fue. María llegó a perder casi cincuenta kilos. Y ese reto superado le ha dado millones de seguidores. ¿Su receta? Cambiar de hábitos. Paulatinamente. También, aprender a quererse. ¿Tiempo de preparación? ¡El resto de tu vida! Y eso que sus recetas, entre las que hay zumos verdes, mugcakes variados, macarrones integrales con cúrcuma, pizza de garbanzos o snacks de espelta y avena, son bastante sencillas. Su experiencia saltó a la Red, cobró forma de libro y hoy sigue creciendo, ganando el peso más que saludable del éxito con Haz click y cocina sano (Hércules de Ediciones). 

¿Y este segundo libro, cómo se cocinó, aparte de con optimismo y buen humor? «Nos quedamos cortos con las recetas de Haz click y vive sano, que cuenta la historia de cómo aprendí a comer y a vivir sano, explica la autora. Creíamos que estaría bien un segundo libro de recetas». Y voilà. Aquí las tienen, algunas para la vida. De entrada nos recibe un diente de león con la máxima: Lo imposible solo tarda un poco más. ¿Pides un deseo y... soplas? «Este es un manual de vida sana, sencillo, para gente que está empezando, pero decidida a cambiar su estilo de vida y a comer mejor», afirma María. Se dice pronto. ¿Es fácil hacer click? «No. No es fácil. A mí me lo preguntan mucho: ?¿Cómo se hace, María? Ayúdame?». Lo primero, empezar. «El click puede llegar de varias formas, como cuando te das cuenta de que tienes que cambiar algo, cuando sabes que debes cambiar de trabajo o dejar ya de fumar». 

«Sin chocolate me muero»

¿Somos lo que comemos? «Somos un compendio de muchas cosas. Somos lo que comemos. Somos lo que pensamos. Somos cómo nos vemos. Pero en cualquier caso comer sano ayuda a verse de otra forma. La vida sana empieza en la cabeza», asegura María. ¿Y sigue en la cocina, no? «Sí. Sigue en la cocina. Y al final, lo más difícil es enfrentarse al espejo, reconocerse, quererse. Si me miro y me insulto, comer sano no habrá servido de nada».

Las recetas de Haz click y cocina sano, recalca, permiten diseñarse un menú con facilidad y unas pautas base, para cimentar el cambio. Pero ojo, que «todo va unido: deporte, vida sana y, sobre todo, pensamientos positivos». Que no falte uno de los ingredientes esenciales para llevar a cabo el mandamiento crucial: vive sano.

¿Y el dulce, debemos renunciar a él? «Se puede hasta adelgazar comiendo dulce, pero sabiendo cómo...». Este es un cómo de buen diente. Danos una pista, María... «¡Yo sin chocolate me muero! El cacao, indispensable, cuanto más puro mejor. ¿Y las calorías? «El cacao tiene muchas calorías y grasas, admite. Pero hay que intentar ir a las gamas sin azúcares añadidos».

Nutrámonos bien, con fundamento. Hay quien dice que un plato de lentejas es el elixir de la eterna juventud. Y mira, siempre han estado ahí, no son como la novedad de las semillas de chía o lino. «Sí, las legumbres tienen muchas propiedades, y además si las combinas con cereales tienen mucha proteína. Proporcionan los aminoácidos que necesita el cuerpo. Sin embargo, la gente tiende a apartarlas porque tienen hidratos. La gente oye la palabra hidrato ¡y huye! Hay que comer de todo. No basta con alimentarnos de lechuga o pescado a la plancha». Para variedad, el gusto de sus recetas, en las que no faltan las natillas de chocolate o los pasteles de harina de almendra. «A veces me dicen ?¿pero eso engorda, no?, cuenta María. A ver... engordar engorda todo, pero hay que saber qué calorías metemos en nuestro cuerpo. Yo prefiero calorías de calidad que vacías. Mejor pastel de almendras que un bollo industrial». 

Cheat meal... a veces

¿Y el subidón que da una palmera de chocolate envasada? «En el momento sí», pero convienen alternativas saludables. «Es un esfuerzo añadido, pero que a la larga compensa, porque da más energía y te sientes mejor».

Con un click y constancia, María Corbacho perdió cincuenta kilos en un par de años, «siempre con calma, no quería que fuese una operación bikini, sino algo definitivo», dice. ¿Nunca caes en la tentación? «Claro que sí», confiesa. ¿Pero en la de algo muy malo, como un bollo industrial? La vida sana tiene su huequito para el cheat meal, oímos aliviados. A veces querer es... ¡comer!