Carlos Negreira acaba con 28 años de alcaldes socialistas

f. espiñeira, G. Lemos, R. Domínguez A CORUÑA / LA VOZ

ELECCIONES GALLEGAS 2009

El candidato del Partido Popular logra con 14 ediles la mayoría absoluta

23 may 2011 . Actualizado a las 18:54 h.

Carlos Negreira (Río de Janeiro, 1961) ganó ayer su apuesta particular. Se lo jugó todo a ser alcalde de A Coruña y las urnas le sonrieron. Consiguió los catorce concejales que le dan la mayoría absoluta y no le hacen depender de nadie.

Acaba así el mito de la ciudad más socialista de Galicia, que se empezó a construir hace 28 años, cuando Francisco Vázquez consiguió la primera de sus seis mayorías absolutas. Negreira se quedó un concejal por debajo de sus expectativas, aunque subió en doce puntos el porcentaje de votos obtenidos por su candidatura (43,4 %). Ello se tradujo en casi 50.000 votantes, 13.000 más que en el 2007, lo que le bastará a los populares para gobernar la ciudad con tranquilidad los próximos cuatro años.

La otra cara de la moneda es el PSOE, que ha sufrido un fuerte descalabro. Perdió no solo en número de concejales, pasando de los once de la actual corporación a los ocho que tendrá en el próximo cuatrienio, sino también en número de votos hasta encontrar un suelo de apoyo ignorado desde los primeros comicios democráticos en 1979. Así, los socialistas coruñeses dilapidaron en apenas ocho años el colchón del vazquismo, que en el 2003 logró su última mayoría absoluta con 57.000 papeletas y el 45,7%.

La candidatura encabezada por Javier Losada se quedó ayer en 31.000 sufragios y rozando el 27% del total de papeletas emitidas.

No solo se desmorona Losada, el BNG también recibe un fuerte castigo con respecto a hace cuatro años. Cae ocho puntos y medio en votos y reduce su representación a la mitad, con cuatro concejales, tras el cambio de cabeza de lista, con el histórico Henrique Tello relevado por Xosé Manuel Carril tras un tormentoso proceso interno en el que se reabrirá el debate tras el paso por las urnas.

La sorpresa de la próxima corporación será Esquerda Unida-Os Verdes, que captó el voto de los descontentos de la izquierda para hacerse con un concejal al superar, por primera vez desde 1979, la barrera del 5%. Obtuvo casi 7.000 votos, que le darán voz a su alternativa en estos cuatro años.

Otra vez a las puertas se quedó Unión Coruñesa. Su candidato, Carlos Marcos, sumó el 4% de los apoyos y se quedó a más de 1.000 votos de obtener su acta de concejal.

Negreira: «Nunca podré olvidar este gran caudal de confianza»

La euforia fue absoluta en la sede del PP una vez que se confirmó el escrutinio. Negreira no ocultaba su satisfacción entre una marea azul de felicitaciones. «Nunca podré olvidar este gran caudal de confianza que han depositado en nosotros los coruñeses, pero también quiero destacar que este no será un cambio contra nadie, sino a favor de todos», anunció el ganador de los comicios antes de comprometerse a «no rebajar ni un solo euro en el gasto social» y prometer «una María Pita abierta a todas las personas».

Lágrimas y abrazos en el PSOE

Lágrimas y abrazos de consuelo en la sede de la Agrupación Socialista. Javier Losada anunció su intención de «seguir trabajando para sumar más votos y apoyos» al PSOE. Agradeció el trabajo de los miembros de su candidatura y de su familia y amigos y aseguró que «aceptamos la decisión que han tomado los coruñeses y felicito al PP y a Carlos Negreira», antes de reivindicar su trabajo «con ilusión y ganas durante estos cuatro años para hacer avanzar a la ciudad hacia más éxitos».

Tranquilidad en el BNG

La sede del BNG fue la que siguió el escrutinio con mayor tranquilidad. Apenas algún familiar de Xosé Manuel Carril y los miembros de su candidatura. El candidato nacionalista defendió que su partido «ten futuro e quere ser unha alternativa na cidade e na comarca». El aspirante nacionalista avanzó que «non nos gustan os resultados, que non son para nada positivos para a cidadanía, porque temos a experiencia do modo de xestión de Goberno do PP na Xunta de Galicia».