Touriño lleva a Burela el ansiado corredor del norte

ELECCIONES GENERALES 2008

Reta a Rajoy a que aprenda en A Mariña cómo se integra a los inmigrantes

23 feb 2008 . Actualizado a las 03:09 h.

«Non vexo a ninguén e póñome a temblar», decía un miembro de la organización media hora antes de comenzar el mitin. En los últimos días, un cierto temor recorrió las filas socialistas locales porque el primer acto de campaña de Emilio Pérez Touriño debía competir con uno de los eventos más importantes que acogerá Burela este año: el partido de fútbol sala entre la selección de España (campeona de Europa) y la de Uruguay. Un encuentro que en cualquier otro lugar hubiera pasado desapercibido pero no en este concello que, deportivamente hablando, solo vive por y para el fútbol sala.

«As últimas veces que veu encheu sempre e hoxe tamén vai encher», afirmaba uno de los primeros en llegar al auditorio de la Casa da Cultura de Burela. Después de todo, Touriño jugaba en territorio amigo. En las últimas municipales, los socialistas arrebataron la alcaldía al PP, que había gobernado los 12 años de vida de este joven concello.

Y los burelenses cumplieron con un Touriño que a modo de rey mago llegó a A Mariña lucense cargado de regalos. Allí anunció que ayer mismo el DOG desbloqueaba la tan ansiada vía de alta capacidad del norte, «que servirá para conectar a periferia da periferia, un proxecto que unirá Celeiro con Ferrol e no que se investirán 285 millóns de euros». «Hoxe anunciamos a variante de Ortigueira, pero ao longo do 2008 o 60% das súas obras estarán en obras, en licitación ou en proceso de expropiación». En resumen, Touriño prometió que en el 2011 estará operativa en su totalidad.

Era la respuesta más contundente que podía dar a los manifestantes que el domingo reclamaban el desbloqueo del corredor y a la que minutos antes había aludido el alcalde de Burela, Alfredo Llano. «Organizouna o PP e xuntou a 300 persoas porque deron pinchos que se non...».

Touriño, que en su intervención ni siquiera mencionó a sus socios de gobierno insistiendo en la necesidad de apostar por el voto útil, convirtió a Burela en el referente de lo que él quiere para Galicia y del que Rajoy debería aprender: «Un modelo de convivencia e integración dos emigrantes, e un lugar onde o 90% dos nenos e das nenas falan galego».