La deuda catalana permitiría construir 450.000 viviendas públicas en Galicia
ESPAÑA
Multiplica por catorce el presupuesto de la Xunta en materia de sanidad
05 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La comparación de la deuda de Cataluña con el Estado con cualquier parámetro de gasto público en Galicia aleja la posibilidad de pensar en una condonación total por parte del Gobierno central. Asciende a 71.000 millones de euros, una cuantía que multiplica por seis los Presupostos de la Xunta para este año, los más altos de la historia autonómica. Es catorce veces superior al capítulo dedicado a sanidad y veinticinco al de educación.
La cuantía también permitiría construir 450.000 nuevas viviendas públicas en Galicia, ya que su coste medio en la comunidad es de unos 157.000 euros, según datos del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS). Utilizando estos datos, sería también posible conceder una ayuda de 20.000 euros por beneficiado para rehabilitar todas las viviendas con demandantes de este tipo de ayudas en Galicia y, además, construir 280.000 nuevas. Es más, con aproximadamente el 3% de esa cuantía, sería posible cubrir a la totalidad de los demandantes de vivienda inscritos en el registro, que asciende a más de 17.000 personas —más de la mitad en la provincia de Pontevedra—.
La vivienda pública es uno de los asuntos que dividió durante los últimos meses al Gobierno gallego y al Ejecutivo central. En la precampaña de las elecciones municipales del 28M, el presidente Pedro Sánchez anunció que 50.000 inmuebles de la Sareb —el denominado banco malo— pasarían a engrosar el parque público de vivienda en alquiler a precios asequibles. Esa cifra se fue desinflando, ya que solo 9.000 estaban en condiciones para entrar ya a vivir y otras 12.000 precisaban obras de rehabilitación. En Galicia, el Ejecutivo cifró en 1.285 las viviendas disponibles, pero la Xunta corrigió pronto a la mínima esa estimación y expuso que solo 43 de todas las que tiene la Sareb en la comunidad están en condiciones de poder ser adquiridas. «O maior número de vivendas que nos ofrecían era en Mugardos e en Silleda», expuso entonces la vicepresidenta segunda y titular de Vivenda, Ángeles Vázquez. Además, solo cinco contaban con licencia de primera ocupación y tres estaban okupadas.
Otro parámetro que demuestra el elevado volumen de deuda que el Gobierno podría condonar en Cataluña es el coste con el que el Ejecutivo bonifica la AP-9 para, entre otras cosas, extender la gratuidad de los viajes de vuelta en el mismo día. Son 2.300 millones de euros hasta el 2048, unas 30 veces inferior al déficit catalán. Esa cifra es, precisamente, ligeramente más baja que la deuda gallega con el Estado a través del Fondo de Facilidad Financiera, creado en el 2015 para las comunidades que sí cumplían con los objetivos de déficit.