Un patrullero con base en Ferrol intercepta dos buques de guerra rusos en el Mediterráneo

E. Barrera FERROL / LA VOZ

ESPAÑA

El patrullero Centinela tiene su base en Ferrol
El patrullero Centinela tiene su base en Ferrol FUERZAS ARMADAS

El Centinela, con 40 marinos a bordo, siguió y monitorizó este martes a la fragata Admiral Kasatonov y al barco cisterna Akademik Pashin en aguas bajo vigilancia española

27 abr 2023 . Actualizado a las 12:27 h.

El patrullero de altura Centinela, con base en Ferrol, interceptó este martes dos buques de guerra rusos en aguas del Mediterráneo occidental. Según informó el Estado Mayor de la Defensa, el barco español, que está dotado con 40 efectivos y se encuentra integrado en el Mando de las Unidades de la Fuerza de Acción Marítima, localizó a la fragata Admiral Kasatonov y al buque cisterna Akademik Pashin cuando navegaban por la zona marítima que se extiende por el golfo de León y el mar Tirreno y que cubre el archipiélago balear y las islas de Córcega y Cerdeña. Así, señalan fuentes autorizadas, el patrullero de la Armada Española realizó tareas de seguimiento y monitorización tras el avistamiento.

El Centinela, indican desde el Estado Mayor, está actualmente integrado en el marco de las Operaciones Permanentes de las Fuerzas Armadas y se encuentra realizando labores de vigilancia y de seguridad marítima en aguas del sur peninsular, con la finalidad de «mantener presencia y garantizar los intereses nacionales en aguas de soberanía española». Además del mantenimiento de la seguridad marítima, el patrullero presta apoyo en operaciones de lucha contra la inmigración ilegal, el narcotráfico y otras actividades delictivas.

Con relación a la actuación desarrollada, fuentes autorizadas indican que se trata de un «procedimiento habitual» enmarcado en los cometidos de vigilancia y disuasión que, destacan desde el Estado Mayor, son una «herramienta eficaz» para detectar amenazas de manera anticipada y, agregan, desplegar una «respuesta inmediata y viable ante una potencial crisis».

«Fragata multipropósito»

Los dos barcos bélicos rusos en seguimiento, la fragata Admiral Kasatonov y el buque cisterna Akademik Pashin entraron en servicio en el año 2020. En el primer caso, la embarcación forma parte de la Flota del Norte y fue construida por la empresa rusa Severnaya Verf. La «fragata multipropósito», según destaca el Ministerio de Defensa ruso, cuenta con un sistema de misiles antiaéreos de alcance medio, misiles de tipo Óniks y Kalibr y está dotada, además, con cohetes antisubmarinos. El Akademik Pashin, por su parte, se trata de un engrasador de reabastecimiento, desplegado desde agosto en el Mediterráneo, y cuya finalidad es la de acompañar expediciones de largo alcance.

En cuanto al patrullero de altura Centinela que localizó los buques rusos, bajo el mando del capitán de corbeta Alejandro Álvarez Brasa, el Ministerio de Defensa destaca que el barco fue construido en la antigua Bazán, en Ferrol, en 1991 y entró en servicio un año más tarde. Es el segundo de una serie de cuatro buques de altura de la Armada de la clase Serviola y tiene un peso de 1.200 toneladas, una longitud o eslora de 68,65 metros y una anchura de 10,35 metros. En materia de armamento cuenta con dos ametralladoras Browning de calibre 12,7 y una ametralladora MG de calibre 7,62, así como una cubierta de vuelo para helicópteros de pequeño tamaño, entre otras prestaciones.

Entre sus misiones más destacadas está su participación en la Operación Romeo Sierra para la recuperación del Islote Perejil o las labores de vigilancia y apoyo a la flota pesquera española en el Sáhara y Canadá durante la denominada crisis del Fletán, en el año 1995, que enfrentó a España y Canadá. El patrullero está concebido para navegar en alta mar durante períodos prolongados de tiempo y con estados de la mar desfavorables.

Otros dos barcos de la Armada Española participaron en una misión similar el pasado enero

No es la de este martes la primera operación de vigilancia de buques de guerra con bandera rusa por parte de barcos de la Armada Española, con base en Ferrol, en lo que va de año.

Concretamente, el pasado enero, la fragata Méndez Núñez (F-104) y el patrullero de altura Serviola monitorizaron una fragata rusa, también de la Flota del Norte, que navegaba hacia el sur por el Canal de la Mancha. Así, la fragata Admiral Gorshkov, dotada con misiles hipersónicos tipo Zircon, fue rastreada, en primera instancia, por el Serviola a veinte millas al norte de la Zona Económica Exclusiva española y posteriormente las tareas de vigilancia recayeron en la F-104, que continuó el seguimiento hasta la llegada del buque ruso a aguas portuguesas.

«Procedimiento habitual»

A partir de ese momento, indicaban fuentes del operativo, el control fue asumido por las autoridades del país vecino. Además, un avión de D4 de vigilancia marítima acompañó en la localización y seguimiento de la fragata rusa que, con anterioridad, había sido monitorizada por la fragata francesa D656 Bretagne y por barcos de otros países.

Ya en aquel momento el Estado Mayor de la Defensa matizaba, a tenor del escenario internacional y de la guerra entre Rusia y Ucrania, que este tipo de prácticas se encuadran dentro del «procedimiento habitual cuando buques de otros países navegan por aguas de interés nacional» como parte, abundaban, de las «operaciones permanentes de vigilancia».

Operaciones con la OTAN

También se encuentra desplegada, dentro de la Brilliant Shield de la SNMG-1 de la OTAN, la fragata Álvaro de Bazán (F-101), con base en Ferrol, que, el pasado febrero, puso rumbo al Mar del Norte y que, este lunes, tal y como informó el Estado Mayor de la Defensa, cumplió el «hito marinero de cruzar hacia el norte del Círculo Polar Ártico». El buque ya recorrió más de 3.400 millas náuticas.