Sánchez, sobre la ley del «solo sí es sí»: «Tiene efectos indeseados y me quedo corto»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

ATLAS TV

El presidente del Gobierno dice que reformar la norma es «de sentido común» y ofrece diálogo para resolver los problemas que presenta

08 feb 2023 . Actualizado a las 19:13 h.

«Resulta evidente que en pocos meses hemos comprobado algunos efectos indeseados de la ley en su aplicación. Digo efectos indeseados y me quedo corto». La frase del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre la ley del «solo sí es sí» deja clara la voluntad del sector socialista del Ejecutivo de reformar la norma para impedir que las rebajas de condenas continúen en el futuro. Con o sin el respaldo de Podemos. La crisis es ya la mayor que ha vivido nunca la coalición de Gobierno. Y la guerra entre los dos sectores del Ejecutivo no cesa. E incluso se recrudece.

Las palabras de la ministra de Justicia, Pilar Llop, en las que para defender la propuesta de reforma de la ley presentada por el PSOE indicó que con ese texto «con una herida ya se puede probar que ha habido violencia» y, por tanto, no es necesario probar que no hubo consentimiento, desataron las iras del sector de Podemos, que acusó al PSOE de querer retroceder «al Código Penal de La Manada».

Ataques de Podemos a Llop

«Si probar la violencia en una agresión sexual es tan sencillo, ¿por qué en el 2021 de 4.000 sentencias solo 500 mujeres pudieron probarla? Otra vez el foco en las mujeres, en cuánto nos resistimos, en si cerramos las piernas. Es el modelo de La Manada, no el del consentimiento», escribió en Twitter la secretaria general de Podemos, Ione Belarra.

Las posiciones parecen irreconciliables porque Unidas Podemos cree que la reforma presentada por el PSOE retira el consentimiento del eje central de la norma. Pero Sánchez fue muy claro al afirmar que es necesario modificarla. «¿Qué se hace cuando se plantea un problema en la aplicación de una ley? La respuesta es sencilla: utilizar el diálogo, pero para resolver el problema», sentenció. Recalcó que «ni el Gobierno ni los grupos parlamentarios que la aprobaron tuvieron como objetivo que se rebajara la condena a ningún agresor», pero existe «un problema» porque ha habido rebajas y es «de sentido común» hacer «lo correcto», que es defender «el gran avance» que supone la ley y «corregir el problema para que en el futuro no pueda haber ni una rebaja de penas». 

La ministra de Justicia, Pilar LLop, se mostró más crítica con el texto de la norma impulsada por Igualdad y señaló que «no es de recibo que con esta ley se haya producido una bajada de penas en donde en nuestro país salga más barato agredir sexualmente a una mujer con violencia que robar». Sin citar expresamente a Podemos, la ministra dijo que se está «confundiendo a la opinión pública» al afirmar que lo que se pretende es volver al modelo anterior.

Pero la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez, de Unidas Podemos, replicó que lo que no quiere su grupo es «un modelo penal en el que para demostrar una agresión importen más nuestras heridas que nuestra voluntad». Rodríguez se aferró a las palabras de Llop que, según indicó, dijo con mucha claridad que si se puede probar la violencia ya no es necesario probar el no consentimiento. «Este es el verdadero problema y la discrepancia. No es confusión, es discrepancia», afirmó.

El PP cree que la propuesta de los socialistas es casi idéntica a la suya y por eso la apoyará en el Congreso

A pesar de que ni el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ni ningún dirigente del PSOE se lo ha pedido, el PP está dispuesto a apoyar en el Congreso la reforma de la ley del «solo sí es sí». Los populares consideran que la reforma que han impulsado los socialistas es «prácticamente idéntica» a la que ellos presentaron en diciembre y, por tanto, expresan su voluntad de respaldarla cuanto antes. La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, señaló que en caso de que hubiera alguna diferencia entre lo que proponen los dos partidos «ya habrá tiempo durante la tramitación legislativa para limar esas cuestiones e intentar que no haya otra chapuza», aunque los socialistas no tienen ninguna intención de negociar con el PP.

Gamarra cargó contra el PSOE por no llevar ayer su propuesta a la Mesa del Congreso para que fuera tomada en consideración por la vía de urgencia y puso en duda incluso que el PSOE llegue a sacar adelante su reforma porque la sensación es que «prima más quién la apoya» que rectificar las rebajas de condenas.

«Nuestros votos están a disposición para iniciar la tramitación y revisar las penas», señaló la secretaria general del PP. Los socialistas explicaron que la vía de urgencia es excepcional y que presentarán su propuesta el próximo martes, siguiendo «el procedimiento habitual legislativo».

Pero para el PP «lo que hay detrás» de ese retraso es «que prima la coalición del Gobierno frente a las mujeres, que como Unidas Podemos no lo apoya, no están dispuestos a que salga sin ellos».

Vox no va a «blanquear» al PSOE

Vox advirtió que, aunque no se va a oponer a que se tramite la reforma presentada por los socialistas, no va a «blanquear al PSOE» ni le va a «ayudar a dar la cara» ante las excarcelaciones y rebajas de penas a agresores sexuales que se están produciendo con esta ley.

El portavoz parlamentario de la formación, Iván Espinosa de los Monteros, señaló que el PSOE «sabía lo que estaba tramitando» con la ley del «solo sí es sí» y que esta «iba a liberar a cientos de violadores, pederastas y abusadores sexuales».

Y por eso, según explicó, Vox no va a caer en la trampa de hacer «como que esta iniciativa solo es de Podemos» y permitir que ellos se hundan mientras Sánchez «sale el primero del barco que se está hundiendo». Para Espinosa de los Monteros, esta ley no es de la ministra de Igualdad, Irene Montero, sino que es de Pedro Sánchez.

Los socios del Ejecutivo piden unidad y evitan respaldar el texto del PSOE

La propuesta de reforma de la ley del «solo sí es sí» que presentó el PSOE tiene garantizada su aprobación si el PP la apoya en el Congreso. Pero esa no es la vía que buscan los socialistas, que tratan de llegar a un acuerdo con Unidas Podemos y de atraer a los socios del bloque de la investidura. Sin embargo, el PSOE no cuenta en este momento con el respaldo ni de su socio de Gobierno ni de sus aliados parlamentarios. Tanto ERC como Más País, Compromís y el PDECat reclaman que los dos socios del Gobierno busquen un texto de consenso y cesen en la «pugna» y el «espectáculo» que están ofreciendo con este tema.

El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, explicó que están en proceso de «escucha» y análisis de la propuesta socialista. Pero avanzó que no tendría sentido que se aprobara una reforma de la ley del «solo sí es sí» en contra del ministerio que la ha impulsado. Rufián dijo que la intención de ERC es «no fomentar el ruido» que, a su juicio, se está produciendo y tampoco busca ser «parte del problema» para que la norma pueda ser mejorada. Situó la «línea roja» para ERC en el respeto al consentimiento y en no regresar al «infierno probatorio» de las víctimas.

Piden acabar con el «ruido»

La portavoz de Igualdad de EH Bildu en el Congreso, Bel Pozueta, afirmó que «si para que el consentimiento sea efectivo y los jueces crean a las víctimas tienen que demostrar signos de violencia, volveremos al modelo anterior». Y criticó la reforma que plantea el PSOE diciendo que supone «un paso atrás que no responde a la lucha del movimiento feminista y que acaba con el núcleo de la ley» que es el consentimiento.

El portavoz de Más País, Íñigo Errejón, pidió también al Gobierno que no haga de este tema un «caballo de batalla», que «reduzca el ruido» en torno a la reforma de la norma y «traiga una propuesta con acuerdo» que pueda contar con el «mismo apoyo» con el que contó la ley.

En la misma línea, el representante de PDECat, Genís Boadella, lamentó que la reforma llegue «solo de manos del PSOE» y criticó el «espectáculo» entre los dos socios del Gobierno.