Feijoo exige un pacto «por escrito» para reformar la elección del CGPJ y Sánchez lo rechaza

ESPAÑA

El presidente pregunta al líder del PP si quiere «seguir la senda de Casado» y le insta a cumplir con la Constitución
13 oct 2022 . Actualizado a las 10:40 h.Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijoo buscan un acuerdo rápido que permita la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Pero ninguno de los dos está dispuesto a dar la imagen de haber renunciado a sus postulados. El mayor desencuentro se observa en la pretensión del PP de que la negociación de los nombres de los vocales para el consejo vaya acompañada de un compromiso para renovar el sistema de elección de los miembros del CGPJ para que los jueces tengan mayor participación en ese modelo. Este miércoles, en la recepción posterior a los actos del Día de la Fiesta Nacional, Feijoo reiteró de manera informal a la prensa que su partido pretende que exista un compromiso «por escrito» del Gobierno en el que se especifique que una vez renovado el CGPJ se abordará una reforma de la ley para la elección de los miembros de ese órgano. Una reforma que, según Feijoo, puede hacerse «en seis meses».
El mayor obstáculo
Aunque las dos partes insisten en que el acuerdo puede estar próximo, esa reforma del modelo sigue siendo el mayor obstáculo para el pacto. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, explicó en los corrillos informales que no habrá ese convenio por escrito y que no puede haber condiciones previas para el tratado. «El PP sabe que eso no va a cambiar», aseguró categóricamente respecto a la posibilidad de un cambio en el sistema de elección de los vocales del CGPJ. «Yo creo que tras cuatro años de bloqueo y la dimisión del presidente del CGPJ, el PP tiene que tomar una decisión», dijo el jefe del Ejecutivo, dejando en el alero de los populares la decisión de dar pasos para el acuerdo.
Sánchez apuntó que, aunque el pacto parece cercano, hubo otras ocasiones en las que el consenso se rompió en el último momento. «No es la primera vez que hemos estado cerca y luego no ha habido acuerdo», indicó. «¿Quiere cumplir el pacto constitucional del 78 o seguir en la senda de Casado?». Esa es la pregunta que formuló retóricamente a Núñez Feijoo.

La clave sigue estando en esa reforma del modelo. El PP ya habría aceptado, según publicó el diario El País, que el Congreso y el Senado, como establece la ley actual, nombren a los 12 vocales jueces a partir de la lista de 51 candidatos elegidos por los propios jueces en el 2018. En aquella ocasión, el acuerdo estaba cerrado y se frustró por un wasap enviado por el entonces portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, en el que decía que este partido iba a «controlar por detrás» la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo a través de juez Manuel Marchena.
Rafael Mozo: Un juez progresista y dialogante para el consejo
A pesar de que el informe técnico encargado por el presidente saliente, Carlos Lesmes, indicaba que quien debía sustituirlo en la presidencia del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Supremo es el actual vicepresidente del Supremo, Francisco Marín Castán, los vocales del Poder Judicial tienen la intención de nombrar como presidente a Rafael Mozo, el vocal de más edad en el CGPJ, que tendrá que jubilarse el próximo mes de marzo. Mozo es un juez del sector progresista del consejo y está muy vinculado al magistrado del Tribunal Constitucional Cándido Conde Pumpido, que es el hombre elegido por el PSOE para presidir el Tribunal Constitucional cuando se proceda al relevo de su actual presidente, José González-Trevijano.
Elegido a propuesta del PSOE
Mozo es magistrado de la Sala Penal de la Audiencia Nacional desde el año 2018. Hasta ocupar ese cargo, prestó servicio en la Audiencia Provincial de Madrid desde el año 1998. Ingresó en la carrera judicial en 1985 y estuvo destinado en San Feliu de Guíxols, Sepúlveda, Leganés y Madrid.
El aspirante a presidir el CGPJ entró en ese organismo elegido a propuesta del PSOE. A pesar de ello, no han sido pocas las veces en las que se ha mostrado contrario al parecer del Gobierno, especialmente cuando el Ejecutivo aprobó la ley que limita las funciones del CGPJ mientras permanezca en funciones y le impide hacer nombramientos.
Predispuesto al diálogo
Mozo es miembro de la asociación Jueces para la Democracia, el ala más progresista de la carrera judicial. Prácticamente ninguno de los vocales del consejo apoya el informe técnico que concluyó que, con arreglo a la Ley Orgánica del Poder Judicial, correspondería a Francisco Marín Castán, presidente de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo, ocupar el puesto de Lesmes como presidente del Tribunal Supremo y del CGPJ, y optarán por apoyar a Mozo como presidente.
La mayoría de los vocales considera que sería «erróneo e ilegal» que Marín Castán ocupe la presidencia del CGPJ y del Tribunal Supremo. Mozo, el más veterano de los vocales del consejo, cuenta con más de 30 años de experiencia como juez y magistrado. Quienes le conocen destacan que se trata de una persona con alta predisposición al diálogo y el acuerdo sin tener en cuenta la procedencia o la asociación a la que pertenezcan los vocales con los trata de lograr consensos.
Malestar de los vocales conservadores del CGPJ por las invitaciones al 12-O
Vocales conservadores del CGPJ mostraron su malestar por problemas con las invitaciones para el desfile por el Día de la Fiesta Nacional. La semana pasada recibieron la invitación de la Casa del Rey para acudir a la recepción, que siempre llega junto con la del Gobierno, para asistir a la parada militar. Pero aseguran que en esta ocasión no recibieron la invitación del Ejecutivo. El lunes por la tarde, según indican las fuentes, el Gobierno «cambió repentinamente de opinión» y llegaron las invitaciones a los vocales con la expresa mención de que, por primera vez, «eran sin acompañante», lo que para los vocales «da idea de la precipitación e improvisación». Ante ello, varios vocales decidieron no asistir.