Condenado a 19 años de cárcel el asesino de Esther Escobar

La Voz MADRID / EUROPA PRESS

ESPAÑA

Imagen de archivo de un proceso judicial en la Audiencia Provincial de Madrid.
Imagen de archivo de un proceso judicial en la Audiencia Provincial de Madrid. RUBEN MONDELO

La Audiencia Provincial de Madrid le considera culpable de un delito de asesinato con la atenuante de «estado pasional»

08 sep 2022 . Actualizado a las 12:40 h.

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 19 años de cárcel al asesino de Esther Escobar, la mujer que murió en febrero del 2020 de un tiro en la cabeza tras rechazar a su acosador.

Así consta en una sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, en la que se pena a Antonio Leal a 17 años de cárcel como autor de un delito de asesinato con las atenuantes de estado pasional del 21.3 y la analógica de confesión, así como la agravante por motivos de género.

También se le pena con dos años de cárcel como responsable en concepto de autor de un delito de tenencia ilícita de armas ya definido, no concurriendo con respecto del mismo circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal.

El crimen de Esther, de 40 años y madre de 4 hijos, se produjo a las siete de la tarde del 26 de febrero del 2020 cuando la mujer caminaba por el número 6 de la calle Virgen de los Reyes, en Ciudad Lineal. El asesino se le acercó y le disparó en la sien a bocajarro. Tras el disparo, huyó del lugar y se entregó cuatro días después.

En el juicio, quedó acreditado que Antonio entabló una relación de amistad con la fallecida en junio del 2019. Relación que hacia febrero del 2020 ella decidió dar por concluida, pese a la insistencia del ahora condenado en formalizar una relación sentimental estable.

Así las cosas entre ellos, ambos se citaron sobre las 12:30 del día 26 de febrero en las proximidades de un local que regentaba una hermana de la mujer para pasar el día juntos. Sobre las 19:10 horas de ese mismo día, Antonio, con la intención de acabar con la vida Esther, sacó la pistola del calibre 6,35 que poseía y apoyó el cañón en la sien izquierda de la mujer.

Tal y como se recoge en el apartado de los «hechos probados» de la sentencia, «la extracción del arma fue sorpresiva y privó de toda posibilidad de defensa a Esther». Antonio L. S. realizó entonces un disparo que le produjo a la mujer una extensa hemorragia subaracnoidea, laceración de la base del lóbulo temporal izquierdo, tienda del cerebelo y tronco del encéfalo y lesiones neurológicas incompatibles con la vida. Esther fallecía en torno a las 22:00 horas.