Feijoo advierte sobre el «desprestigio» originado por Sánchez a la Corona
24 may 2022 . Actualizado a las 06:00 h.El Gobierno eleva el tono contra la visita a España del rey emérito. El modo en el que Juan Carlos I resolvió su paso por Sanxenxo no agradó en La Moncloa, por lo que varios integrantes del Ejecutivo salieron ayer desde primera hora para endurecer su discurso al denunciar que no solo había «desaprovechado» una excelente oportunidad para ofrecer las «explicaciones» que le reclama Pedro Sánchez, sino que consideran que incluso convirtió su desplazamiento en una suerte de circo mediático.
Una vez que la Fiscalía del Tribunal Supremo archivó las tres causas que tenía abiertas sobre el rey emérito, este trasladó en una carta a su hijo, Felipe VI, su intención de visitar España desde «la serenidad» y disfrutando de «la mayor privacidad posible», dos compromisos que en el Gobierno consideran que no ha cumplido en su primer viaje desde que estableció su residencia en Abu Dabi casi dos años atrás.
«Seguramente eso que escribió sería lo que tendría que estar haciendo en estos momentos», lamentó ayer Isabel Rodríguez. La portavoz del Ejecutivo se esforzó en remarcar las diferencias entre el actual jefe del Estado, quien «está haciendo todo lo que tiene que hacer», dijo, y su predecesor en Zarzuela, al que afeó su falta de «transparencia» y «ejemplaridad». «Quien no lo está haciendo es su padre. Creo que ha perdido la oportunidad de dar la respuesta que esperan los españoles y merece la democracia», lamentó en una entrevista en RNE.
Fuentes en La Moncloa reconocen que sentaron especialmente mal las palabras pronunciadas por el emérito desde su coche: «¿Explicaciones de qué?», tras ser interpelado por la prensa que hacía guardia a las puertas del chalé en el que se alojó durante su estancia en las Rías Baixas, propiedad de su amigo Pedro Campos, el presidente del Club Náutico de Sanxenxo.
«Mar y barbacoa»
Fernando Grande-Marlaska, el ministro del Interior, se manifestó en unos términos similares, al evidenciar que Juan Carlos I había desaprovechado una «oportunidad de oro» para ofrecer «explicaciones» ante «unos hechos muy graves», y que todavía confía en que estas acaben por llegar: «Espero que las dé en breve», dijo en un acto en Cuenca. «Si en su primer viaje a España no ha aprovechado para dar explicaciones y solo para salir al mar y para una barbacoa, ha perdido la primera oportunidad importante», abundó.
Felipe VI, el «enemigo a batir»
Mientras tanto, en la oposición, Alberto Núñez Feijoo no mencionó en su intervención de ayer en el Comité Ejecutivo del PP la visita del rey emérito a España, pero acusó al Gobierno de comportarse como el «más irrespetuoso e irreverente con todas y cada una de las instituciones de nuestro país», dijo, haciendo un repaso por «el desprestigio» causado en el que incluyó a la «jefatura del Estado». Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, señaló que el «enemigo a batir» en el Gobierno es la Corona, es decir, Felipe VI, y no el rey emérito, al que cree que simplemente utilizan para «intentar transformar España por la puerta de atrás», dijo en un desayuno informativo organizado por El Debate.
Otro de los pesos pesados en el nuevo PP, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, mostró su «pena» por los «ataques miserables» por parte del Gobierno de los que es objeto la Monarquía Parlamentaria, «pero todavía me apena más ver cómo Sánchez mira para otro lado con Podemos y sigue abriendo puertas a ese debate para romper nuestro modelo de Estado».
Rueda dice que le corresponde a Juan Carlos I decidir si da explicaciones
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, rehusó ayer opinar sobre si Juan Carlos I debe o no dar explicaciones y se limitó a señalar que eso es una cosa que debe decidir el propio emérito. Así lo señaló a su llegada a la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP, la primera a la que asiste como máximo mandatario del PPdeG tras suceder a Feijoo después de 16 años al frente.
Rueda insistió en que la presencia de Juan Carlos de Borbón en Galicia ha sido «una buena noticia» desde el punto de vista promocional de la comunidad pero, al ser preguntado por la prensa a las puertas de Génova sobre si debe dar «explicaciones», indicó que «no corresponde al PP decirlo». «No voy a valorarlo si tiene que darlas, no lo sé, eso es una cosa que tendrá que decidir él», comentó, para a renglón seguido recordar que «no tiene causas judiciales pendientes» que le impidan regresar a España y moverse con libertad por el país.
Podemos señala al PSOE como el «impedimento» hacia «un sentido republicano»
En Unidas Podemos continuaron sus ataques contra el rey emérito y contra la Corona, lo que no les impidió cargar contra sus socios de coalición en el Ejecutivo, un PSOE al que señalan como «el principal impedimento para una reforma constitucional y para un avance progresista en sentido republicano».
Pablo Fernández, coportavoz de Podemos, compareció ayer en rueda de prensa junto a María Teresa Pérez, secretaria de acción institucional, quien entendió que las críticas del PSOE por el viaje de Juan Carlos I fueron «suaves», una cuestión que aprovechó para reprochar a sus socios en el Gobierno su negativa a abrir una comisión de investigación en el Congreso.
Alberto Garzón, ministro de Consumo, que el domingo llamó al emérito «ladrón», ayer se reiteró al asegurar que había «delinquido». Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales, publicó en Twitter que «el horizonte republicano es la única salida».