Feijoo se ofrece como garante de estabilidad frente a la política «ilusoria» del Gobierno

La Voz AGENCIAS

ESPAÑA

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, durante su participación en la última jornada del Cercle de Economía, en Barcelona
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, durante su participación en la última jornada del Cercle de Economía, en Barcelona Andreu Dalmau | EFE

El presidente del PP advierte en Barcelona de que España lleva demasiados años viviendo en «el conflicto y la trinchera»

06 may 2022 . Actualizado a las 13:00 h.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, se ha ofrecido este viernes como la alternativa que garantiza estabilidad política y económica a España frente a la «política ilusoria» del Gobierno de Pedro Sánchez y las disensiones internas en el Ejecutivo.

Feijoo ha lanzado ese mensaje en las jornadas anuales del Cercle d'Economia que se celebran en Barcelona ante decenas de empresarios que han escuchado sus recetas políticas y económicas y su apuesta por superar el conflicto entre Cataluña y el resto de España.

El presidente del PP ha ligado política y economía y ha lamentado que haya gobiernos como el de Sánchez que consideren las cuestiones económicas como «un engorro, un truco de los poderes ocultos para impedir la realización de sus aventuras». Con ironía, ha considerado que intentan «recrear el paraíso terrenal que describen las sagradas escrituras donde la abundancia no conoce límites y cualquier deseo puede ser realizado»,

Frente a ello, ha hecho hincapié en que los recursos son limitados y la economía y la política han de ir de la mano y son las dos caras de un deseo compartido por todos: la estabilidad. Ha recalcado en ese contexto que no es compatible la estabilidad económica con la inestabilidad política ni viceversa y que, «lamentablemente y cada vez con mayor virulencia», España está sufriendo actualmente las dos.

En el ámbito político ha advertido de que España lleva ya demasiados años viviendo en «el conflicto y la trinchera» y de que las tensiones partidistas están dentro del Gobierno. Cree que el Ejecutivo rechaza los consensos básicos y eso alimenta la inestabilidad política y económica.

«La política ilusoria que nos gobierna empieza negando las dificultades y la realidad económica de España y no tiene nada que ver con la irrealidad con la que el Gobierno quiere que veamos las cosas», ha alertado.

También se ha referido a la polémica por el espionaje con el sistema Pegasus para señalar que «lo que ha pasado esta semana en la política nacional y que ha afectado a la política catalana es la antipolítica». En contraposición a esas prácticas ha afirmado que él ofrece un proyecto político que se resume en la estabilidad.

Tras su intervención inicial, el presidente del Cercle d'Economia, Javier Faus, en un breve coloquio posterior, le ha planteado cómo es posible casar esa estabilidad con los pactos con Vox. Feijoo ha recordado que Vox es una escisión del centro derecha y, por tanto, es a este espacio político al que más perjudica. En consecuencia, ha reconocido que le molesta que haya escisiones en el PP, ha destacado las diferencias que les separan de la formación de Santiago Abascal y ha asegurado que va a trabajar por recuperar a los votantes populares para construir una alternativa.

Eso es lo que ha subrayado que él ofrece, ya que ha insistido en que no ha llegado para hacer oposición, sino para ofrecer esa alternativa. A su juicio, para algunos partidos la convulsión no es algo transitorio, sino una situación permanente que les permite ocultar la carencia de proyectos de futuro.

«La agitación para ellos es la materia prima, y su mayor deseo es que las fricciones vayan seguidas de más fricciones de forma que se genere un malestar crónico y que la sociedad civil quede subyugada por un escaso número de la población que se dedica a la política», ha añadido.

Más economía y menos política, la receta para Cataluña

Feijoo ha insistido en que la estabilidad es sinónimo de futuro y un buen punto de encuentro en el que haya también una cercanía entre Cataluña y el resto de España.

Tras recordar lo que «ha sufrido el pueblo catalán de forma injusta por el procés», el líder del PP se ha referido a la guerra en Ucrania para afirmar que ya hay pruebas de que la invasión forma parte de una estrategia global que tiene otros hitos como el debilitamiento de la Unión Europea y el intento de fragmentar estados como España mediante actuaciones «insidiosas».

«En este nuevo contexto -ha añadido- el procés pasa de ser un instrumento supuestamente liberador a convertirse en una pieza para intentar subordinar las democracias occidentales a una potencia autocrática», ha añadido. Feijoo ha calificado el procés de «un pésimo negocio» con «un objetivo imposible que solo puede generar parálisis y frustración y ha recalcado que Cataluña no puede quedarse atrás y necesita hablar menos de política y más de economía.

Ha acusado al Ejecutivo catalán de haber ejercido el autogobierno de forma poco responsable pero ha reivindicado los beneficios de ese autogobierno que cree que se demuestran por ejemplo en lo que ha conseguido Andalucía en los últimos años.

Al detallar la situación económica de España se ha referido a la inflación que existía incluso antes de la guerra en Ucrania, el endeudamiento creciente, la revisión a la baja de la previsión de crecimiento y el envío a Bruselas de un cuadro macroeconómico «irreal».

Las palabras de Feijoo han sido acogidas con aplausos de los empresarios del Cercle, y su presidente le ha pedido que trabaje por «la centralidad y la moderación», ya que solo desde esta postura es posible gestionar la pluralidad de una sociedad abierta como la española, evitando la polaridad y la confrontación.