Su modelo y el del Gobierno de Pedro Sánchez son, según la dirigente del PP, «antagónicos», con «autoritarismo, asfixia fiscal, y extremismo». Díaz Ayuso criticó también que «no hay día que no pongan en tela de juicio la división de poderes, que no ofendan al español medio con gestos hacia sus socios golpistas y proetarras, que no le solivianten quitándole su patrimonio y su derecho a conocer y participar en el rumbo de su país». Ante esa situación, prometió ser un «contrapeso».