El apoyo de Esquerra a la estabilidad del Ejecutivo sigue en el aire. «¿Qué confianza le podemos otorgar al Gobierno español?», preguntó. «Ha pasado de negar que hubiera espionaje a afirmar que si la había es porque nos lo merecemos», remató.
En la misma línea, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, reiteró las exigencias de dimisiones y una investigación a fondo e independiente. Aragonès denunció la «doble vara de medir» que a su juicio ha aplicado el Gobierno. «Contra el independentismo todo vale», afirmó. «Cuando el espionaje masivo es contra las instituciones catalanas y el independentismo, silencio y excusas. Hoy, todo son prisas. Hay que asumir responsabilidades ya», urgió. «Por acción o por incompetencia quedan muchas preguntas por responder», concluyó.