La familia como argumento
La presidenta regional reprochó a Lobato que su padre «autorizara la compra de mascarillas en el Ayuntamiento», en referencia al polémico contrato de Luis Medina y Alberto Luceño, que ya investigan los tribunales y por el que ambos empresarios se habrían embolsado casi seis millones en comisiones. El socialista pidió la palabra para responder por alusiones a las acusaciones, pero la presidenta del Parlamento autonómico lo impidió con la excusa de que también se había mentado al hermano de Ayuso. «Tomen la decisión de dejar de usar a los familiares como argumento político», esgrimió Eugenia Carballedo.
Lobato explicó después que el contrato nunca pasó por el servicio jurídico de la empresa municipal, por eso, en ningún caso, se avaló desde la asesoría jurídica. Lo corroboró también su padre, que aseguró ante los medios desconocer «por completo» el convenio de las mascarillas y le exigió a Díaz Ayuso disculpas públicas. «Nunca me ha llegado -apuntó-, ni al jefe del departamento de la empresa».