El comisionista Luis Medina engañó al fiscal diciendo que nunca movería el dinero: «¡No, no, no, hombre, nada!»

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

Europa Press

Un año después de esa comparecencia en Anticorrupción, el juez de Madrid que ha asumido la querella de la Fiscalía baraja imputarle el delito de alzamiento de bienes tras el pelotazo por la venta inflada de mascarillas

16 abr 2022 . Actualizado a las 22:58 h.

El comisionista, empresario y aristócrata Luis Medina reaccionó así cuando el fiscal le advirtió que no debía hacer nada raro con sus propiedades, ante el claro riesgo de cometer un delito de alzamiento de bienes: «¡No, no, no, no, hombre, nada!».

Un año después de esa comparecencia en Anticorrupción, el juez de Madrid que ha asumido la querella de la Fiscalía por la presunta estafa en la venta de material sanitario baraja imputarle el delito, tras ordenar el embargo de su bienes y comprobar que solo tenía 247 euros en una de sus cuentas en el Deutsche Bank. 

Momentos antes de la sarta de negaciones del investigado, el fiscal Luis Rodríguez Sol repasó las compras hechas por Medina tras recibir su comisión de un millón de dólares (unos 925.000 euros) por el pelotazo de la venta inflada de mascarillas al Ayuntamiento de Madrid: un barco velero y unos productos financieros.

«¿Qué hizo usted con el millón de dólares que recibió, a qué dedicó el dinero?», le preguntó el fiscal a Medina. Este primero respondió «a mis gastos, a mis cosas» y tras la insistencia de que concretase más, contó la compra en los Países Bajos del yate Eagle 44 por 325.000 euros y la adquisición de unos Bonos Nota gestionados por el Deutsche Bank por un valor total de 400.000 euros.

«Yo voy a ser muy sincero. Si el día de mañana [la investigación] va al juzgado, hay que pedir el embargo de los bienes. Y su abogado le podrá decir, si usted hiciera cualquier maniobra intentado, no sé, ponerlo a nombre de otro, eso sería un delito», le advirtió el fiscal.

Medina le respondió varias veces «no» y «nunca». Su letrado, hasta ese momento bastante callado, apoya al comisionista diciendo «nada mas lejos, señor fiscal: colaboración extrema».