La ley tiene mecanismos para reemplazar al presidente en caso de incapacidad para ejercer el cargo. En esa situación, el mando pasaría al vicepresidente primero, Alfonso Rueda. Pero más allá de esa normativa pensada para imprevistos, el PPdeG tiene una holgada mayoría absoluta de 42 parlamentarios con la que gestionar un relevo ordenado.
Uno de los 42 diputados del PP
Aunque fuentes del PP lo consideran un escenario «casi impensable», si Feijoo dejase Galicia el sustituto tiene que ser uno de esos 42 diputados. Así lo establece el artículo 15 de la Ley 1/1983, de 22 de febrero, reguladora de la Xunta y su Presidente: «El Presidente de la Xunta será elegido por el Parlamento Gallego de entre sus miembros». Y solo dos de los 42 son miembros del Gobierno de la Xunta: el vicepresidente Rueda, titular de Presidencia, Justicia y Turismo; y su homólogo Francisco Conde, responsable de Economía, Empresa e Innovación. Esa circunstancia los situaría en puestos de salida, pero no se puede descartar a otras figuras como Pedro Puy, que ya aparecía en el 2016 en las quinielas de la sucesión.