En un intento de impedirlo, el concejal de Más Madrid Jorge García Castaño reclamó ayer que se desconvoque el pleno previsto para la aprobación de los presupuestos tras la renuncia del edil Felipe Llama porque, a su juicio, lo que se está produciendo es una «alteración de la voluntad ciudadana». «Las instituciones tienen un límite. Almeida, no vale todo», afirmó.
El líder de Vox, Santiago Abascal, aprovechó lo ocurrido para tratar de agrandar al brecha entre el alcalde y Ayuso al pedir a la presidenta madrileña que «ampare a la Fundación Madrina» porque «lo del alcalde, José Luis Martínez-Almeida, no tiene nombre». Los concejales carmenistas exigieron a cambio de su voto a favor que se retiraran las subvenciones «a las entidades que acosan a mujeres en las clínicas de interrupción del embarazo» entre las que incluyen a la Fundación Madrina. «Que le pregunte a Vox por qué no se ha querido sentar, porque si se hubiera sentado, esa subvención estaría incluida», respondió Almeida, añadiendo que la prórroga de los presupuestos «impediría de facto poder darla».
