Suiza remite los últimos datos sobre el rey emérito, cuya investigación asume Luzón

MATEO BALÍN COLPISA | MADRID

ESPAÑA

Francois Lenoir | Reuters

Tras su examen se pondrá punto final a las diligencias abiertas en junio del 2020

16 dic 2021 . Actualizado a las 21:18 h.

La Fiscalía del Tribunal Supremo ha recibido la comisión rogatoria que esperaba de Suiza en el marco de las diligencias de investigación que se siguen sobre las cuentas del rey emérito. Se trata de la última documentación reclamada a la Fiscalía de Ginebra para cotejar una de las dos regularizaciones fiscales realizadas por el rey Juan Carlos I. Tras su examen se pondrá punto final a las diligencias abiertas en junio del 2020. En todo caso, no será antes del mes de enero.

Precisamente, esta información relativa a las cuentas de la fundación Zagatka, que abonó ocho millones de euros entre el 2009 y el 2018 para viajes y estancias del anterior jefe del Estado, fue recibida por Juan Ignacio Campos, teniente fiscal del Supremo fallecido el pasado miércoles. Campos, de 71 años, llegó a trasladar a la fiscal general Dolores Delgado esta novedad, según fuentes del departamento. Luego se fue a su domicilio tras felicitar las Navidades a sus compañeros y murió de forma repentina ese día por la tarde.

No obstante, hace algún tiempo estuvo de baja por una grave enfermedad y desde ese momento otro fiscal codirigía la investigación. Se trata del jefe de Anticorrupción Alejandro Luzón, que ahora liderará en solitario el cierre de las pesquisas. Para ello, cuenta con un equipo de apoyo formado por otros tres fiscales y peritos de la Agencia Tributaria.

«Legado imborrable»

Respecto al fallecimiento de Campos, que ha causado una gran consternación en el Ministerio Público y el Tribunal Supremo, la capilla ardiente tuvo lugar este jueves en la sede de la Fiscalía General, su lugar de trabajo y donde a lo largo de la tarde pasaron compañeros, amigos y familiares. 

«Es una gran pérdida para la carrera fiscal. Era un ejemplo de profesionalidad, discreción, lealtad y honestidad. Uno de los mejores penalistas de este país. De talante conciliador y comprometido con el servicio público (...) deja un vacío irreemplazable en la Fiscalía española y un legado imborrable para todos los compañeros», escribió la Fiscalía General en una nota. Pese a la enfermedad, Campos había estado «al pie del cañón» y aplazó su jubilación para culminar el cometido asignado por Delgado: liderar las diligencias penales contra el anterior jefe del Estado.