Ni foto de Colón bis, ni tregua entre Casado y Ayuso

m. E. A. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

PP

28 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

«No están jugando al ratón ni al gato», como aseguró el portavoz nacional del PP y alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, pero lo parece. Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso arroparon ayer a los colectivos policiales en su protesta contra la anunciada reforma de la ley mordaza por separado, en tiempos distintos y sin coincidir.

Las pistas que tanto los protagonistas como sus equipos habían dado el día anterior ya hacían sospechar que la esperada foto entre ambos dirigentes tendría que esperar. Y el guion se cumplió al milímetro. El líder de los populares aceleró su agenda en León, donde había reunido a los presidentes provinciales del partido, para llegar a tiempo a la marcha. Casado alteró el orden del día del encuentro e intervino en primer lugar, antes incluso que el anfitrión, Alfonso Fernández Mañueco, para poder estar de vuelta en Madrid a mediodía.

En torno a la una y media, el jefe de la oposición hacía su entrada en la plaza de Colón, ya en el final de la manifestación, acompañado por Martínez-Almeida, el vicesecretario de comunicación, Pablo Montesinos, y varios miembros del PP de Madrid, entre ellos Pío García-Escudero, responsable de la gestora que controla la formación regional. Dos horas antes, lo había hecho Díaz Ayuso, que no acompañó la marcha, según dijo, por el carácter institucional de su cargo de presidenta de la Comunidad de Madrid. «Creo que es mejor así», aseguró a los periodistas.

Casado negó ayer estar evitando a Díaz Ayuso, con la que no coincide en público desde el pasado 19 de octubre, y atribuyó a un problema de agendas que no se hayan encontrado desde entonces. «Cada uno —justificó— llega a lo que puede». Pero su distanciamiento personal, que la propia presidenta regional ha confirmado, es la mejor muestra de la profundidad de la crisis abierta dentro del PP por el control de la organización en Madrid.

Los tres partidos, por separado

Casi tanto protagonismo como los funcionarios tuvieron desde el principio los tres partidos de la oposición que apoyaron esta protesta, PP, Vox y Ciudadanos. Pablo Casado, Isabel Díaz Ayuso, José Luis Martínez-Almeida, Santiago Abascal e Inés Arrimadas, entre otros, se hicieron notar con un revuelo mediático considerable, aunque en todo momento evitaron reeditar la foto de Colón, eludiendo los líderes de las tres formaciones aparecer en un mismo plano.

Los gritos de «¡presidente, presidente!» con los que fue recibido Abascal a su llegada dejaron claro que la política iba a teñirlo todo ayer en la marcha policial.