El líder del PP carga contra la nueva Ley de Memoria Democrática: «Nadie debe desenterrar viejas heridas ni descoser el perdón sellado por nuestros abuelos»
21 jul 2021 . Actualizado a las 16:01 h.Tres años de su elección como presidente del Partido Popular, Pablo Casado ha reunido este miércoles a la Junta Directiva de su formación para hacer balance y arengar a los suyos de cara a un momento clave de la legislatura. Congregados en el Parador de Gredos (Ávila), el líder conservador se ha erigido como «única» alternativa al Gobierno de Pedro Sánchez, al que ha mandado un recado: «No es de fiar para nadie».
Casado está tratando de rearmar el partido de cara a la Convención General que se celebrará el próximo octubre, una hoja de ruta que pasa por la «reunificación del centroderecha» para evitar la sangría de votos por sus dos alas parlamentarias, Vox y Ciudadanos. También por lo que ha denominado «un contrato liberal».
Sin embargo, la nueva Ley de Memoria Democrática ha centrado gran parte de su discurso, una norma que, como aseguró el martes, se comprometió a derogar si llega a ser presidente. El líder de los populares la ha calificado como «un irresponsable interés en dividir a la sociedad». «Nadie debe desenterrar viejas heridas ni descoser el perdón sellado por nuestros abuelos», ha añadido. También ha asegurado que los indultos a los que dieron «un golpe de Estado» en el 2017 o los «beneficios penitenciarios a asesinos etarras» de estos últimos meses son «la muestra de la peor degradación política y moral».