El PP no ofrecerá batalla y allana la elección de Ander Gil al frente del Senado

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

ESPAÑA

J.J. Guillén | EFE

Los populares aprecian en el nuevo líder de la Cámara Alta un «buen árbitro» para moderar el debate

12 jul 2021 . Actualizado a las 17:02 h.

A diferencia de los ministros, cuyo nombramiento depende exclusivamente del jefe del Gobierno, la elección del presidente del Senado es competencia de la Cámara Alta, pero Sánchez no tendrá ningún problema en colocar ahí al burgalés Ander Gil, que en los últimos años había desempeñado la función de portavoz del grupo parlamentario socialista.

En este momento el Senado se encuentra oficialmente sin nadie a la cabeza. Pilar Llop, que llegó al Senado en el 2019 en sustitución de Manuel Cruz, era senadora por designación autonómica por Madrid, y era este lunes cuando estaba previsto que volviese a formar parte oficialmente de la Cámara tras las elecciones autonómicas del 4 de mayo, en donde fue elegida diputada. Y todos, hasta los senadores socialistas, contaban con que en el pleno telemático que hay convocado para este lunes se eligiese otra vez a esta jueza como presidenta una vez volviese a jurar como senadora por designación autonómica. Sin embargo, el movimiento de Sánchez de última hora eligiéndola como ministra de Justicia supone que Llop no ocupe el único puesto que le corresponde a los socialistas madrileños tras el 4-M.

De este modo, en la votación de hoy el PSOE propondrá para la presidencia de la Cámara Alta a Ander Gil, y tal y como confirmaron fuentes populares a este periódico, el PP no presentará a ningún candidato alternativo, incluso «es probable» que se abstengan, facilitando la elección de Gil, algo que no decidirán de forma definitiva hasta las horas previas. De este modo, el socialista, un gran conocedor del funcionamiento de la Cámara Alta, no tendrá ningún problema para salir elegido presidente, incluso sin recurrir a sus habituales aliados, como el PNV.

El PNV sigue decidiendo

Los nacionalistas vascos mantendrán su puesto de privilegio en la Mesa de la Cámara Alta, ya que a diferencia de la sesión constitutiva, los otros seis puestos restantes no se vuelven a elegir en la votación de este lunes. El reparto de fuerzas en el órgano de gobierno de la Cámara es de tres senadores socialistas, tres populares y uno del PNV, que pese a que no le correspondía por peso, lo logró en las negociaciones de comienzos de la legislatura tras pactarlo con el PSOE. De este modo, el vasco es el que acaba decantando todas las votaciones de la Mesa, incluso en ocasiones a favor de los populares, como hizo recientemente con el descenso del IVA de las peluquerías, una votación que tras salir adelante acabó anulada por Llop. Las mismas fuentes destacan el talante «amable y cercano» de Gil, vaticinando que si no se pliega demasiado a Sánchez, puede ser «un buen árbitro».