Díaz Ayuso: «España empieza en Madrid porque aquí viene lo mejor del mundo»

Mercedes Lodeiro REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

La presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso y el alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, en una imagen de archivo.
La presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso y el alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, en una imagen de archivo. PARTIDO POPULAR

«Gobernar con opulencia desde la Moncloa tiene los días contados», asegura

05 may 2021 . Actualizado a las 00:33 h.

«España empieza en Madrid porque aquí viene lo mejor del mundo a vivir en paz y libertad», afirmó anoche una exultante Isabel Díaz Ayuso cuando el recuento electoral le otorgaba 64 diputados -logró 65-en la Asamblea, lo que representa más que toda la izquierda junta: PSOE (24), Más Madrid (24) y Unidas Podemos (10), y después de cosechar en el 2019 el peor resultado del PP en Madrid, 30 de 132 escaños.

La otra gran victoria de la presidenta madrileña es haber succionado a Ciudadanos y haber dejado el bloque de la derecha reducido a dos partidos, el suyo y Vox, al que habría impedido además un crecimiento desmedido.

El triunfo tiene su pequeña pócima de amargura porque al no haber obtenido la mayoría absoluta, fijada en 69 diputados, necesitará el apoyo o la abstención de Vox para ser investida presidenta. La candidata fue prudente y nunca se sumó a un cordón sanitario al partido de Santiago Abascal. Ayuso quería tener «las manos libres» para aplicar su programa, bajar los impuestos y proteger la educación especial, la concertada, la pública y la privada, y anoche, desde la sede en venta del PP en Madrid, prometió «dos años de Gobierno en libertad».

En su encendida intervención, Ayuso proclamó: «Hoy empieza un capítulo en la historia de España desde el kilómetro cero». Y lanzó un guiño a esos comerciantes a los que no les cerró los negocios pese a la pandemia del covid-19. «Taberneros, espero que hayáis pasado un buen día; yo, también», les dijo a los hosteleros, «porque el sanchismo no entra en Madrid, no se puede cerrar todo». «Gobernar con opulencia desde la Moncloa tiene los días contados», afirmó.

Por los resultados, todo apunta a que su candidatura logró movilizar electores habitualmente abstencionistas, de sectores poco ideologizados, y provocó un terremoto en votantes de partidos del bloque de la izquierda y los atrajo hacia el PP.

El efecto Ayuso llevó a los madrileños a elegir su «modelo de comunidad y de país» y su gestión de la pandemia con la apertura de la comunidad.

«Muchos tabernarios han votado a Isabel Díaz Ayuso mal que le pese al señor [José Félix] Tezanos», valoró el portavoz del PP en la Asamblea y director de campaña de la presidenta, Alfonso Serrano.

Atrás deja los 48 escaños de Cristina Cifuentes y pasa a engrosar la lista de las mayorías absolutas de Alberto Ruiz Gallardón y Esperanza Aguirre, siempre por encima de los 54 asientos. Con su clara victoria no tendrá que luchar como en el 2019 cuando salvó los muebles y llegó a la presidencia gracias a un pacto con Cs y Vox. Ahora le llega con arrimarse a este último.

La presidenta llegó a la sede de la calle Génova antes de las ocho y media de la noche, cuando los sondeos auguraban su éxito y donde el partido ya había preparado una gran celebración para la noche electoral. Los populares tenían organizado un despliegue en la puerta de la sede, con el tradicional balcón, que en las autonómicas del 2019 fue sustituido por una improvisada tarima al dar todos los sondeos que la izquierda sumaría para gobernar. Además, se cortó la calle y se colocaron sillas sobre el asfalto.

No eran todavía las diez y media cuando Ayuso se asomó al balcón con Pablo Casado, provocando los gritos emocionados de los simpatizantes. «¡Libertad, libertad!, ¡presidenta presidenta!», repetían. La abultada presencia de simpatizantes recordaba las grandes victorias de Aznar y Rajoy e hizo olvidar las medidas de distancia aconsejables en situación de pandemia.