Un empresario confiesa que Francisco Correa medió en adjudicaciones de gobiernos del PP

El vicepresidente de la constructora Teconsa, José Luis Martínez Parra, que en septiembre será juzgado en la Audiencia Nacional por las irregularidades de Gürtel en Boadilla del Monte (Madrid), confiesa ahora que el líder de la trama, Francisco Correa, medió para conseguirle adjudicaciones en administraciones en las que gobernaba el PP.

A cambio, y en lo que se refiere a Boadilla, Martínez Parra pagó a Correa por la adjudicación de varios contratos en ese municipio 1,8 millones de euros en el 2007, según asegura en el nuevo escrito de defensa que ha presentando ante la sección segunda de lo Penal por estos hechos, al que ha tenido acceso Efe, y en el que manifiesta su conformidad con la acusación de la Fiscalía.

Se suma así a la confesión que ya hizo el propio Correa en esta causa -que también se ha mostrado conforme con los hechos relatados por la Fiscalía-, tildando de «amoral» la actuación que, según él, tuvo el exalcalde de Boadilla Arturo González Panero, el Albondiguilla, porque «cambiaba adjudicaciones aún habiéndoselas prometido a un empresario», si posteriormente otro mejoraba la dádiva.

Anticorrupción reclama 9 años de cárcel y multa de 3,8 millones de euros para Martínez Parra, ya condenado a 11 años y 7 meses de prisión por los contratos de la trama Gürtel para la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia en el 2006; y ahora el empresario propone a la Fiscalía que rebaje a 2 años de prisión su petición de pena con la aplicación de la atenuante analógica por confesión.

«Teconsa tenía como principal actividad la construcción de todo tipo de obras, tanto pública como privada, y encargó al grupo del señor Correa la gestión para la adjudicación de obras públicas a su favor. Todo ello con conocimiento de las magníficas relaciones que tenía este grupo con distintas administraciones gobernadas por el Partido Popular. Y sabedor del coste que conllevaba la citada gestión para pago de los favores que se le iban a conceder», expone en su escrito.

Según relata, su padre, que era el presidente de Teconsa, conoció a Correa en un viaje a Galicia por la común relación que tenían con Pablo Crespo, número 2 de Gürtel y que fue dirigente del PP en Galicia, y después en el 2008 se lo presentó a su hijo, que se responsabiliza de las decisiones de su progenitor porque, dice, fue «conocedor y consentidor» de la mayoría de ellas.

A raíz de hacerle el encargo de que mediara en las adjudicaciones de obras, Teconsa obtuvo distintos contratos de obras por el Ayuntamiento de Boadilla del Monte y la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda (EMSV) de ese municipio.

De este modo se le adjudicaron las obras de la piscina municipal cubierta por un valor total de 974.084 euros, «sin cumplirse la normativa» para la contratación con las administraciones públicas.

También le fueron concedidas las obras en un Colegio de Enseñanza Primaria y un colegio de educación infantil, y entre el 2001 y el 2007 se le adjudicaron tres promociones de viviendas.

Por estos contratos, Teconsa le abonó a Correa los citados 1,8 millones de euros: 1,3 en efectivo y 420.000 euros en facturas emitidas por Cresva, sociedad de Pablo Crespo y que «reflejaban servicios inexistentes».

Por los contratos de la trama Gürtel en Boadilla, la Fiscalía solicita penas de 76 años y 7 meses para Correa; 64 años y 7 meses para Crespo; 40 años y 9 meses para el exalcalde de Boadilla Arturo González Panero, el Albondiguilla (40 años y 9 meses); 2 y medio para su sucesor, Juan Jesús Siguero; y 23 años y medio para el exdiputado del PP Alfonso Bosch, entre otros acusados.

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