El relevo en la Delegación del Gobierno andaluza sube la presión para forzar la salida de Susana Díaz

La Voz

ESPAÑA

Pedro Sánchez y Susana Díaz, en una imagen de archivo, en un mitin en Sevilla en el 2019
Pedro Sánchez y Susana Díaz, en una imagen de archivo, en un mitin en Sevilla en el 2019 Raul Caro | Efe

Ferraz maniobra para desalojar a la expresidenta de la Junta de la secretaría general del PSOE de Andalucía

30 mar 2021 . Actualizado a las 17:06 h.

La presunta paz sellada entre Pedro Sánchez y Susana Díaz tras la victoria del actual presidente del Gobierno en las primarias del PSOE ha saltado definitivamente por los aires este martes. El relevo de la delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García, afín a Díaz, por el sanchista Pedro Fernández, alcalde de Baza (Granada), se ha interpretado en Sevilla como una declaración de guerra en toda regla por parte de Ferraz y de la propia Moncloa.

En juego está la secretaría general del PSOE en Andalucía, todavía en manos de la expresidenta de la Junta. Susana Díaz aspira a renovar el cargo en el congreso regional que se celebrará a finales de año, después de que el partido cumpla a mediados de octubre con el trámite de un congreso federal que se prevé como un nuevo paseo de Pedro Sánchez. El jefe del Ejecutivo tiene bajo su control todos los resortes del aparato socialista y ya nadie osa plantarle cara en el seno del partido después de su destitución como secretario general y su posterior resurrección en las primarias y las urnas. Ferraz promueve como candidato a la secretaría general del PSOE andaluz al alcalde de Sevilla, Juan Espadas, que tiene ante sí el reto de desalojar a la expresidenta de la Junta de la sala de mando de la principal agrupación socialista española, con 40.000 militantes.