Negociaciones contra reloj de Aragonès para que JxCat acepte investirlo presidente el martes

Mercedes Lodeiro REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Pere Aragonès con su mujer, este sábado en Barcelona
Pere Aragonès con su mujer, este sábado en Barcelona Andreu Dalmau | EFE

El choque en el secesionismo aflora la posibilidad de una repetición electoral

28 mar 2021 . Actualizado a las 10:54 h.

Sí, pero todavía no. Esto es lo que dijo ayer JxCat al candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, quien fracasó el viernes en su intento de ser investido en el Parlamento catalán al no lograr el apoyo del partido de Carles Puigdemont y Jordi Sànchez. Y ese sí, pero todavía no, implica que este martes en la segunda votación del pleno de investidura los posconvergentes pueden mantenerse en la abstención, con lo que el candidato volvería a perderla al quedarse otra vez únicamente con 42 votos (ERC y CUP) de los 135.

La división entre el independentismo hace asomar una vez más el fantasma de la repetición electoral, en la que en este caso Junts aspiraría a arrebatarle la posición de fuerza mayoritaria del independentismo a Esquerra para negociar luego con más fuerza. Ahora bien, al menos de momento, la búsqueda de esa repetición es negada en las filas de Junts. El presidente de su grupo parlamentario, Albert Batet, aseguró ayer que ve «lejos» un acuerdo con ERC y la CUP que permita investir a Aragonès, aunque descartó un escenario en el que se agote el plazo de dos meses para mantener negociaciones y que tenga que haber una repetición electoral en Cataluña. En ese sentido, emplazó a los 74 diputados independentistas a alcanzar un acuerdo que les permita avanzar hacia la autodeterminación, y no un «acuerdo de investidura» puntual. «No especularemos con un nuevo candidato o unas nuevas elecciones, no enviaremos a la papelera de la historia a Pere Aragonès», dijo.

Por su parte, el candidato de ERC mantuvo ayer que «hay tiempo para poder llegar a un buen acuerdo» con JxCat que le permita ser investido el martes: «Por nosotros no quedará», dijo. En las horas que quedan hasta esa votación, los republicanos apuran las posibilidades de encarrilar las negociaciones, todo y pese a la invitación de JxCat a Aragonès a no presentarse a la segunda votación para dar así más días de margen al diálogo. Pero Aragonès insistió: «Seguiremos trabajando desde ahora hasta el martes». Y adelantó que la portavoz de ERC en el Parlamento, Marta Vilalta, estaba negociando a contra reloj con representantes de JxCat. Estos se sienten arrinconados por haber priorizado ERC el acuerdo con la CUP y haberlos dejado a un lado cuando ellos sí serán socios de Gobierno. Ahora, sabedores de que son imprescindibles, intentan sacar contrapartidas en la negociación. Como Batet, el secretario general de JxCat, Jordi Sànchez, también dio a entender que el acuerdo está lejos: «Todo el mundo ha visto el poco interés del candidato a presidente por buscar complicidades con JxCat. Es legítimo, nada que decir».

Tras la investidura fallida del viernes, se ha activado la cuenta atrás de dos meses para investir a un presidente. Si no es posible, el 26 de mayo serían convocadas elecciones para 54 días después, es decir, para julio.