El actor, ahora en la lista de Ayuso en Madrid, daba vida en una obra teatral representada en Pontevedra a un cargo público no muy ético
05 abr 2021 . Actualizado a las 18:12 h.En enero del 2007, Toni Cantó ya flirteaba con la política, pero su vida estaba centrada en su oficio de actor. Visitó Pontevedra para presentar la obra Baraka, original de María Gaos, que coproducía y protagonizaba. La periodista de la Voz María Conde lo entrevistó. En esta pieza teatral, Cantó daba vida a un político no muy ético. «¿En cuál se ha inspirado?», le preguntó la periodista. «Es un político inconsciente, y perdón por la redundancia... Me he basado en todos. Sin ir más lejos, estos días nos están dando un espectáculo bochornoso de cómo poner por encima del interés del país el interés de los partidos. Me parece vergonzoso, quisiera pensar que esta sociedad no merece unos políticos como esos, pero te vas dando cuenta de que tenemos los políticos que nos merecemos», respondía en aquel momento.
Cantó pertenecía entonces a la ya extinta UPyD y reconocía que desde Madrid ya estaba ayudando a la gente de Ciutadans de Catalunya, germen de Ciudadanos, partido en el que ha militado. Este jueves, Cantó se ha mostrado «ilusionado» por la «oportunidad» que le ha dado el PP de sumarse como independiente a la candidatura de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid porque considera «esencial sumar fuerzas» en torno a la presidenta, ya que «hay peligro real de que gobierne el sanchismo e Iglesias»
En una entrevista en EsRadio Cantó, ha hecho balance de los últimos movimientos en Cs, tildando de «increíble» el «giro totalmente incomprensible» que ha dado la formación, que ha pasado de gobernar «muy bien» en algunas comunidades a «empeñarse en derribarlo todo». También reconoció que ha optado por sumarse al PP porque «por desgracia» todas las encuestas dicen que Cs se quedaría fuera del Parlamento de Madrid y «por eso es esencial sumar fuerzas» en torno al proyecto de Díaz Ayuso.
Cantó también ha asegurado que está censado en Madrid desde hace unos días, cuando decidió dejar la política y empezar a trabajar, aunque tendrá que acreditarlo ante la Junta Electoral.