PNV y EH Bildu desatan una guerra por ser socios de referencia del Gobierno

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

El líder de PNV, Andoni Ortuzar, junto al presidente del Goberno, Pedro Sánchez
El líder de PNV, Andoni Ortuzar, junto al presidente del Goberno, Pedro Sánchez Jesús Hellín | Europa Press

Otegi carga contra el partido de Urkullu por «dar oxígeno» a los populares

08 mar 2021 . Actualizado a las 09:21 h.

El PNV ha sido desde hace décadas el socio preferente de todos los gobiernos en minoría que ha habido en España. De izquierda o de derecha. Un aliado que, aunque se ha guiado siempre por sus propios intereses, ha servido como contrapunto de las posiciones más doctrinarias de socialistas y populares. La inédita experiencia de un Ejecutivo de coalición del PSOE con una fuerza situada a su izquierda ha provocando sin embargo una guerra abierta entre los dos principales partidos nacionalistas de Euskadi, PNV y EH Bildu, por convertirse en socios vascos de referencia para el Gobierno central.

 Deshielo del PNV con el PP

La pugna viene de lejos, pero el líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, la expresó ayer en toda su crudeza, acusando al PNV de «dar oxígeno» al PP «cuando está asediado por escándalos de corrupción» y de hacer «el juego a la derecha española». La batalla en el nacionalismo vasco reproduce la pugna en el Gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos. El pragmatismo del PNV llevó a que en una sola semana pasaran de ser socios de Mariano Rajoy y apoyo decisivo para aprobar sus Presupuestos, a ser determinantes en la moción de censura que desalojó al líder popular y llevó a al socialista Pedro Sánchez a la Moncloa. Pese a ello, el PNV siempre ha visto con desconfianza a Unidas Podemos por su proximidad con EH Bildu y ha dejado claro que negociaba bilateralmente con Sánchez.

La decisión del líder del PSOE de convertir a los de Otegi en un socio estable en Madrid, y el hecho de que EH Bildu se proclame como único partido vasco capaz de forzar al Gobierno a un giro hacia un reconocimiento del derecho de autodeterminación han desatado los celos del PNV, que tiene al PSOE como socio en el Ejecutivo de Vitoria y pretende forzar a Sánchez a elegir aliado en Madrid. A través de su líder orgánico, Andoni Ortuzar, el PNV ha enviado un mensaje a Sánchez advirtiéndole de su hartazgo por la «olla a presión» permanente en la coalición, sin descartar que esa inestabilidad conduzca a un adelanto electoral. El otro aviso fue llegar a un acuerdo con el PP para que los populares cedan al PNV uno de los puestos que les corresponderían en el Consejo General del Poder Judicial en caso de que se llegue a un acuerdo para su renovación. El anuncio de Ortuzar sobre el «deshielo» con el PP es una advertencia más al PSOE.

 Ruptura de Galeusca

El PNV recela de las intenciones de Sánchez y del hecho de que Unidas Podemos intente situar a EH Bildu como socio preferente vasco del Gobierno. Mientras Otegi aparece cada vez más implicado en la gobernabilidad de España, el PNV ha perdido capacidad de presión por el hecho de que ERC, que es ahora el primer partido del independentismo catalán y socio preferente del PSOE, sea aliado de EH Bildu. También el BNG, tradicional socio del PNV, se ha pasado al bloque de Otegi. Y Junts per Catalunya, el partido de Carles Puigdemont, no es ya, por su radicalidad, el aliado fiable para el PNV que representaba CiU, con el que reeditó junto al BNG la alianza histórica de Galeusca (rebautizada Galeuscat). La pugna en el nacionalismo vasco va en aumento, pero Sánchez mantiene, mientras sea posible, la opción moderada del PNV sin romper la alianza con EH Bildu que le garantizan sus socios de Unidas Podemos.