Lliga Democràtica e Izquierda en Positivo recurren el aplazamiento de las elecciones catalanas

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

Hemiciclo del Parlamento de Cataluña
Hemiciclo del Parlamento de Cataluña Quique García

Aragonès condiciona el avance de la mesa de diálogo a la victoria de ERC y advierte que el Tribunal Supremo «tiene sed de venganza contra los presos políticos»

18 ene 2021 . Actualizado a las 11:13 h.

La Lliga Democràtica e Izquierda en Positivo han anunciado este lunes la interposición de sendos recursos contra el aplazamiento de las elecciones que estaban convocadas inicialmente para el 14 de febrero y que el Govern ha decidido retrasar hasta el 30 de mayo. En un comunicado, la Lliga ha explicado que su comité ejecutivo decidió el pasado sábado recurrir el decreto de aplazamiento electoral aprobado el viernes, que deja sin efecto la celebración de las elecciones el 14F.

Este lunes a las 09.30 horas la Lliga, formación extraparlamentaria del catalanismo moderado liderada por Astrid Barrio, ha presentado en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) «dos escritos de interposición de un recurso contencioso administrativo por el procedimiento de protección de derechos fundamentales y un escrito de interposición de recurso contencioso administrativo ordinario», informa Efe.

Según la Lliga, ha habido un «abuso de poder inaceptable», ya que el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, «no tiene atribuciones para dejar sin efecto una convocatoria electoral y mucho menos para volver a convocar elecciones cuando considere que se dan las circunstancias oportunas».

«Resulta intolerable que quien ostenta el poder en Cataluña sea incapaz de cumplir la legalidad y la manipule a su conveniencia, y por eso la Lliga Democràtica reclama hoy dejar sin efecto el decreto de suspensión» de las elecciones y «exige que se lleven a cabo con las medidas sanitarias que el Govern, desde hace meses, debería haber previsto», añade.

Por su parte, fuentes de Izquierda en Positivo han explicado a Efe que la formación está ultimando el redactado de su recurso. Esta formación, que también es extraparlamentaria y se define como de «izquierda no nacionalista», considera que el decreto que ha aprobado el Govern implica una «suspensión» de los comicios previstos para el 14F y no un aplazamiento, «que sería comprensible si fuera similar a lo que se ha hecho con las elecciones a la presidencia del FC Barcelona».

«El Govern, está rompiendo el mandato del Estatuto de Autonomía y el derecho de participación de los candidatos. Claramente, hay una burla al electorado y a la opinión pública. Hay una vulneración de la ley. El Decreto no retrasa la fecha de las elecciones sino que establece que se 'volverán a convocar'», afirmó la formación este domingo en un comunicado.

Izquierda en Positivo había presentado candidatura para el 14F, con la exsenadora de Podemos Celia Cánovas como cabeza de lista. El pasado viernes, Vox anunció que estudiaría la posibilidad de presentar recurso contra el aplazamiento electoral, mientras que el PSC también sopesará una impugnación si se «cambian las reglas de juego» para el 30 de mayo.

Aragonès condiciona el avance de la mesa de diálogo a la victoria de ERC

El vicepresidente del Govern y candidato de ERC a las elecciones, Pere Aragonès, ha condicionado este lunes la posibilidad de que la mesa de diálogo sobre el conflicto catalán pueda avanzar a que los republicanos ganen las elecciones, previstas para el 30 de mayo. «ERC tiene que volver a ganar las elecciones el Parlament para que esta mesa pueda avanzar. Es la constatación. Solo cuando ERC gana, el diálogo y la solución política avanza», ha apuntado en el Encuentro Digital de Europa Press.

Según Aragonès, la mesa de diálogo se constituyó gracias a la victoria de los republicanos en las elecciones generales, y ha añadido que «las soluciones políticas y el diálogo para resolver conflictos políticos solo avanzan cuando ERC avanza».

Preguntado por si cree que el Tribunal Supremo (TS) tumbará la propuesta de las cárceles catalanas de conceder el tercer grado a los presos del 1-O, ha defendido que el Govern toma las decisiones en materia penitenciaria siguiendo los criterios técnicos de las juntas de tratamiento: «Si las juntas ven posible el tercer grado, nosotros lo avalamos y no tendría que haber ningún problema por parte del TS».

Aunque cree que la decisión de las cárceles catalanas se basa en criterios técnicos, ha advertido de que «el TS tiene sed de venganza contra los presos políticos», por lo que no le sorprendería que el Supremo la anulara.