El rey emérito utilizó presuntamente a un coronel para cometer fraude fiscal

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Juan Carlos I y la reina Sofía, en un acto en el Congreso.
Juan Carlos I y la reina Sofía, en un acto en el Congreso. EDUARDO PARRA / EUROPA PRESS

Anticorrupción preguntó al Reino Unido por los gastos de la reina Sofía

05 nov 2020 . Actualizado a las 08:31 h.

La nueva investigación sobre el rey emérito Juan Carlos I, que la fiscala general del Estado, Dolores Delgado, ha remitido al Tribunal Supremo, apunta a que los pagos correspondientes a gastos realizados por el anterior jefe del Estado y miembros de su familia fueron sufragados durante años por el empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, uno de los hombres más ricos del país azteca, amigo personal de Juan Carlos I, que fue alto directivo del banco Goldman Sachs y primer ejecutivo de la firma financiera en México, Rusia y España. Al margen de la investigación sobre el origen real de los fondos, esos pagos no habrían sido declarados a Hacienda. El hecho de que actúe la Fiscalía señala que hay indicios de que el presunto fraude al fisco superaría los 120.000 euros, lo que constituiría un delito fiscal por el que el rey emérito podría enfrentarse a una petición de pena de hasta cinco años de cárcel.

Los movimientos con cargo a una tarjeta que no estaba a nombre de Juan Carlos I, presuntamente realizados en los años 2016, 2017 y 2018, posteriormente por tanto a la abdicación del anterior monarca, permanecieron ocultos hasta el 2019. La Fiscalía Anticorrupción abrió unas diligencias secretas tras recibir una pista y apreciar indicios de delito. Las pesquisas parten de la investigación a Nicolás Murga, coronel del Ejército del Aire que fue asesor de campo de Juan Carlos I y que siguió a su servicio tras pasar a la reserva. Murga habría servido de testaferro para abonar gastos personales del rey emérito, como viajes, hoteles o celebraciones familiares con fondos proporcionados por Sanginés-Krause para que, de esta forma, no fueran detectados por Hacienda. Una versión de los hechos que el coronel habría negado en las investigaciones preliminares de la Fiscalía.

Presuntos gastos de la reina Sofía

La información adelantada por eldiario.es señala que otros miembros de la familia de Juan Carlos I habrían utilizado también tarjetas de crédito opacas a Hacienda con los fondos ligados a cuentas del empresario mexicano. Entre esos usuarios estarían algunos nietos del rey emérito, que habrían realizado con ellas pagos por Internet, aunque ni la princesa de Asturias, Leonor de Borbón, ni su hermana Sofia estarían entre ellos, como tampoco lo están Felipe VI y la reina Letizia.

Quien sí podría haber incurrido en esos gastos opacos al fisco es la reina Sofía, que habría utilizado las tarjetas para pagar viajes en avión a Londres, donde reside de forma habitual desde hace años, y compras en ese país. La Fiscalía Anticorrupción pidió de hecho información al Reino Unido para aclarar gastos de la esposa de Juan Carlos I.

Aunque el Gobierno ha eludido hacer declaraciones sobre los pormenores del caso y está a la espera de que sea la Casa Real la que haga un pronunciamiento sobre los hechos investigados, el secretario de Estado de España Global, Manuel Muñiz, desligó ayer completamente el papel del rey Felipe VI de las actividades de su padre y aseguró que el actual jefe del Estado desempeña una función «positiva» en la «proyección y la construcción de una imagen de país». Durante su declaración en la Comisión de Exteriores del Congreso, en el marco de las comparecencias de altos cargos sobre los Presupuestos del 2021, Muñiz señaló que en los países extranjeros distinguen «con total claridad» la actuación del monarca de «las posibles actuaciones del anterior ocupante de la Jefatura de Estado». Pero añadió también que «al rey emérito se le ha condenado por nada», y que sus posibles actuaciones no afectan a la imagen exterior de España.