El excandidato de Vox a la Junta de Andalucía deja el partido pero no el acta tras ser denunciado por la Fiscalía

La Voz REDACCIÓN / AGENCIAS

ESPAÑA

EUROPA PRESS

La querella es por fraude de subvenciones

01 jul 2020 . Actualizado a las 18:52 h.

Francisco Serrano, que fue candidato a la Junta por Vox en Andalucía en las últimas elecciones autonómicas del 2018 y hasta ahora presidente del Grupo Vox en el Parlamento andaluz, ha anunciado este miércoles que abandona el grupo parlamentario, aunque mantendrá el acta como diputado no adscrito, así como que se ha dado de baja del partido de Santiago Abascal, todo después de que la Fiscalía Superior de Andalucía haya formulado una querella contra él por presunto fraude de subvenciones, recoge Europa Press.

Serrano ha asegurado que toma estas decisiones «para evitar que la necesaria labor de regeneración que necesita Andalucía y que abandera Vox se vea manchada por las acusaciones» de las que asegura ser «víctima».

Por ello, ha solicitado su baja del grupo parlamentario y su inclusión en el grupo de no adscritos, así como ha solicitado su baja como afiliado de Vox para que no pueda ser usada su pertenencia política a esta formación «como arma contra el partido».

La decisión de Serrano llega después de que la Fiscalía Superior de Andalucía haya informado de que ha interpuesto este miércoles una querella ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra Serrano al atisbar indicios de un presunto delito de fraude de subvenciones con relación a la ayuda estatal recibida en el 2016 por la sociedad limitada Bio Wood Niebla, dado el papel de dicho diputado autonómico y otrora candidato de Vox a la Presidencia de la Junta como socio de tal entidad.

Serrano, diputado por Sevilla, es el segundo parlamentario que accedió a la Cámara autonómica de la mano de Vox que ha decidido dejar el grupo. Antes que él, Luz Belinda Rodríguez, que concurrió por la provincia de Almería, decidió a principios de año romper relaciones con el partido de Santiago Abascal y solicitó pasar a ser no adscrita tras interponer una denuncia ante la Policía Nacional contra sus compañeros y asegurar que ha sufrido «acoso laboral».