Sánchez y Casado se reprochan falta de talante para pactar en medio de la crisis

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Pablo Casado, ayer en su escaño en el Congreso interviene en la sesion de control al Gobierno
Pablo Casado, ayer en su escaño en el Congreso interviene en la sesion de control al Gobierno Pool

El socialista le pide lealtad al popular y este le recrimina que busque adhesión incondicional

25 jun 2020 . Actualizado a las 10:37 h.

Una cosa son las negociaciones entre bambalinas, donde el PP y el PSOE aceleran para llegar a un acuerdo que permita a los populares apoyar la convalidación del decreto que regula la llamada nueva normalidad, texto que se someterá hoy a votación, y otra muy distinta es el debate parlamentario, en el que Pedro Sánchez y Pablo Casado volvieron a evidenciar sus diferencias en la arena del Congreso.

El presidente del Gobierno y el jefe de la oposición tuvieron ayer la oportunidad de decirse en persona los mismos ataques que vienen lanzándose en los últimos días a través de los medios. Sánchez acusó a Casado de «no arrimar el hombro», pidiéndole que reconsiderase su posición en Bruselas para «la negociación del fondo de recuperación» tras el coronavirus, y que «elimine ese ignominioso» informe que Génova mandó a la capital europea y en el que se cuestiona «la democracia española». Por su parte, el líder del PP acusó al jefe del Ejecutivo de no ser capaz de contar a los muertos por el covid-19. «Nos faltan 40.000 compatriotas», lamentó, una cuestión en la que instantes después insistiría la portavoz de su grupo, Cayetana Álvarez de Toledo, quien cuestionó al Gobierno por la sobremortalidad, cuestionando que ya estén con los preparativos de un homenaje solo «para el 60% de las víctimas» mortales de la pandemia. «Dejan a 17.000 compatriotas en el limbo. ¿Si no murieron por la pandemia, de qué murieron?», cuestionó.

Desde la oposición también denunciaron que España se encuentra a la cola en la respuesta económica ante la crisis. Casado se refirió a informes del FMI, la OCDE y Eurostat sobre las curvas que se avecinan en los próximos meses, exigiendo una prolongación de los Ertes hasta final de año. El presidente del Gobierno admitió que las perspectivas no son las mejores, pero indicó que «a partir del segundo semestre del próximo año la recuperación será mucho más poderosa», una réplica que aprovechó para volver a solicitar a Casado lealtad con el Ejecutivo. El líder del PP respondió pidiendo a Sánchez que «deje de buscar chivos expiatorios». «Somos la oposición responsable que usted nunca ha sido. Pide adhesión incondicional, pero rechaza mi mano tendida». 

Rufián: «Eso es omertá»

La segunda pregunta de la sesión de control llegó a cargo de ERC. Rufián afeó al presidente que torpedease la creación de dos comisiones de investigación: sobre las presuntas irregularidades del rey emérito, -«eso no es sentido de Estado, es omertá», denunció-, y acerca de la relación de Felipe González con los GAL. Sánchez afirmó que ni Juan Carlos I ni el exlíder socialista gozan de «impunidad», como denunció el secesionista. La última interpelación llegó a cargo de Baldoví, de Compromís, que advirtió que su apoyo a los presupuestos solo llegará si antes cumple con los compromisos de investidura.