«Atrás quedaron los momentos de las mayorías absolutas. Ahora todos estamos obligados permanentemente a pactar en una geometría variable pero con socios prioritarios que son los que hicieron posible la investidura de Sánchez. La nueva política es también pactar y buscar consensos», insistió. La demostración de que el Gobierno trabaja ya con el objetivo, a priori complejo, de aprobar unos Presupuestos, con los votos del PSOE, Unidas Podemos, PNV ERC y Ciudadanos, refractario a las propuestas fiscales del partido morado y a los postulados independentistas, es que la invitación directa a Cs para sumarse a un acuerdo sobre las cuentas públicas partió ayer desde el sector del Ejecutivo más alejado ideológicamente de la formación política liderada por Inés Arrimadas.
Garzón llama al acuerdo con Cs
El ministro de Consumo, líder de Izquierda Unida y dirigente del PCE, Alberto Garzón, señaló que se sentiría «cómodo» pactando unos Presupuestos con el partido naranja. Para acordar los Presupuestos, Garzón consideró que la clave son «los contenidos». «Y los contenidos hay que discutirlos, deliberar y negociar», añadió. «Los españoles han votado y el reflejo es el Parlamento, que es plural porque la sociedad es plural y negar eso es negar la realidad», señaló para justificar ese posible acuerdo entre dos partidos tan dispares.