Sánchez solicitará al Congreso una nueva prórroga del estado de alarma hasta el 26 de abril
ESPAÑA
El presidente del Gobierno inicia este fin de semana una ronda de contactos con otros líderes políticos en busca de una mayoría que no tiene garantizada
03 abr 2020 . Actualizado a las 21:26 h.Pedro Sánchez solicitará al Congreso una ampliación del estado de alarma hasta el próximo domingo 26 de abril, según adelantó TVE citando a fuentes del PSOE. Tal y como se preveía, el Gobierno ve necesario extender al menos durante otras dos semanas las medidas de confinamiento, con la intención de reducir el número de contagios para permitir oxigenar los servicios sanitarios, por lo que en los próximos días tendrá que regresar a la Carrera de San Jerónimo en busca del visto bueno de la Cámara Baja.
El ministro de Sanidad confirmó esta tarde que Sánchez mantendrá mañana una reunión con el Comité Científico, a continuación otra con el Comité Técnico de Gestión de la crisis del coronavirus y, posteriormente, hablará con los dirigentes de las formaciones parlamentarias. El domingo volverá a tener un encuentro telemático con los presidentes autonómicos, tras el que comparecerá ante los medios y, probablemente, anunciará su intención de alargar el confinamiento. El Congreso deberá celebrar un pleno para debatir esta solicitud del Gobierno, lo que previsiblemente sucederá después del 7 de abril, ya que ese día se han convocado reuniones de la Mesa y de la Junta de Portavoces, los órganos que definen los órdenes del día de las sesiones plenarias.
La licencia de la que dispone el Ejecutivo en la actualidad expira el próximo sábado 11, gracias a la convalidación del decreto que regula el estado de alarma lograda el pasado miércoles 25, cuando consiguió una mayoría muy holgada fundamentada en el apoyo de las principales fuerzas de la oposición. Sin embargo, esta vez la construcción de la mayoría simple que necesita para lograr dicha prórroga no se antoja una tarea tan sencilla.
Si en el último debate ya abundaron los cruces de reproches en una sesión que se prolongó hasta las dos de la madrugada, desde que el pasado sábado Sánchez decidió reforzar las medidas de aislamiento sin tener en cuenta al resto de fuerzas, la crispación política ha ido en aumento.
El líder de la oposición, Pablo Casado, ya advirtió que no está de acuerdo ni con el fondo ni con las formas con las que el Gobierno decidió parar la actividad económica de los sectores considerados no esenciales, poniendo en duda su apoyo en una nueva votación. Vox también ha endurecido su discurso en los últimos días, exigiendo la dimisión de la cúpula del Gobierno. Incluso el PNV, uno de los grandes aliados parlamentarios del Ejecutivo de coalición, denunció que tampoco compartía la forma de proceder del Gobierno. Fuentes próximas a la dirección de los nacionalistas anunciaron que, de celebrarse una nueva votación, no se alinearían con Sánchez.
Sánchez se verá obligado pues a negociar los apoyos parlamentarios que le permitan sumar una mayoría simple, más síes que noes, algo en lo que tiene previsto empezar a trabajar este fin de semana con llamadas a los líderes de todas las formaciones con representación en la Cámara, empezando con el presidente del PP, Pablo Casado, que lamentó que llevara más de diez días sin tener comunicación con el jefe del Ejecutivo.
Teniendo en cuenta que Sánchez logró sacar adelante su investidura en enero por solo dos votos de diferencia, el apoyo de los diez diputados de Ciudadanos o el cambio de postura de alguna de estas formaciones resultará fundamental para que prospere.
La Constitución habilita al Consejo de Ministros a decretar el estado de alarma sin el permiso del Congreso durante 15 días. Una vez transcurridos, el Gobierno deberá contar con el respaldo de la Cámara para prorrogar este estado de excepción el tiempo que estime oportuno.